Después de analizar más de 31 millones redes Wi-Fi públicas o hotspotsen todo el mundo, Kaspersky Lab ha descubierto que una de cada cuatro no son seguras y representan un riesgo para los datos personales de los usuarios que se conectan. Eso significa que todo el tráfico transmitido a través de esas redes, incluyendo mensajes personales, contraseñas, documentos y mucho más, puede ser fácilmente interceptado por los ciberatacantes.
De acuerdo con Kaspersky Security Network, el 25% de las redes Wi-Fi del mundo no tienen ninguna protección de cifrado o contraseña de ningún tipo. Otro 3% de los hotspots usan WEP (Wired Equivalent Privacy) para cifrar datos. Este protocolo no es del todo seguro y se puede hackear en cuestión de minutos con herramientas que están disponibles gratuitamente en Internet.
El resto, casi tres cuartas partes de los hotspots Wi-Fi, utilizan una forma más segura de cifrado basada en la familia de protocolos de Acceso Protegido Wi-Fi (WPA). El esfuerzo requerido para proteger estas redes depende de los ajustes, incluyendo la contraseña. Por ejemplo, si se trata de una contraseña débil o públicamente accesible (que esté, por ejemplo, en pantalla en un café), un cibercriminal también podría descifrar cualquier tráfico transmitido.
Los 20 países con mayor porcentaje de hotspots Wi-Fi no cifrados incluyen muchos destinos turísticos: Tailandia, Francia, Israel, Estados Unidos, entre otros. Los viajeros suelen ser los usuarios más vulnerables porque el hotspot Wi-Fi disponible más cercano es, a menudo, la única forma de mantenerse conectados.
“Aconsejamos a todos los usuarios que se mantengan alerta cuando se conecten a una red Wi-Fi pública, que no utilicen puntos de acceso inalámbricos sin contraseñas para realizar actividades de alto riesgo, como banca online, compras, o transferencia de información confidencial. Si ese tipo de tráfico es interceptado por un tercero, podría derivar en pérdidas graves. Y por supuesto, recomendamos usar medidas adicionales para proteger el tráfico, como la tecnología VPN (Virtual Private Network)”, explica Alfonso Ramírez, director general de Kaspersky Lab Iberia.