Los dispositivos móviles son el principal objetivo de los ciberdelincuentes. Así lo confirman las más de 200.000 muestras únicas de malware para dispositivos móviles registradas por Kaspersky Lab y que representan un 34% más desde noviembre ya que el número de programas maliciosos móviles registrados hace tan solo dos meses era de 148.000 muestras. Estos datos confirman el creciente interés por parte de los cibercriminales por atacar a los sistemas operativos móviles, especialmente Android, que en enero ha alcanzado la cifra de 10 millones de aplicaciones maliciosas según datos de la compañía de seguridad.
El 30 de enero de 2014, en Google Play había 1.103.104 aplicaciones y en las tiendas no oficiales había muchas más. En muchos casos, los cibercriminales utilizan estas tiendas con software legítimo de Android para introducir sus sus códigos maliciosos y así infectar a los usuarios que las descargan.
En la mayoría de los casos, los programas maliciosos tienen como objetivo robar la información financiera del usuario. Este fue el caso, por ejemplo, de la versión móvil de Carberp, un troyano que se originó en Rusia. Este archivo malicioso roba las credenciales del usuario que se envían al servidor del banco. Según los analistas de Kaspersky Lab, la mayoría de estas aplicaciones maliciosas para Android se desarrollan en Rusia.
Para evitar la infección a través de aplicaciones maliciosas, los expertos de Kaspersky Lab recomiendan no activar opciones del desarrollador en el dispositivo, no activar la opción instalar aplicaciones de terceros, instalar únicamente aplicaciones procedentes de las tiendas oficiales, comprobar los derechos que solicitan y sobre todo apostar por una solución de software de seguridad.