Las medianas empresas mejoran en ciberseguridad, acercándose a los enfoques y políticas de las organizaciones más grandes. Divulgación de brechas de seguridad, detección proactiva de amenazas (threat hunting), concienciación o infraestructuras actualizadas son algunas de las parcelas en las que destacan.
Así se desprende del estudio de Cisco ‘Big Security in a Small Business World’, que ha consultado a CISO de 500 empresas de 13 países (incluido España) sobre el estado de la ciber-seguridad en sus organizaciones.
Entre las principales conclusiones, figuran:
Recursos dedicados
El 99% de las medianas empresas consultadas tienen al menos un profesional dedicado a la ciber-seguridad.
La falta de personal cualificado es su cuarto reto más importante. El mayor desafío para las empresas consultadas es la limitación de presupuesto, seguido de la compatibilidad con sistemas heredados.
El 72% utilizan técnicas de threat hunting (detección proactiva de amenazas), muy cerca del porcentaje de grandes empresas que tienen un departamento de threat hunting dedicado.
Infraestructura actualizada
Las medianas empresas no tienen infraestructuras tan actualizadas como las más grandes (el 54% de las grandes empresas afirman estar muy actualizadas, frente al 42% de las medianas). Sin embargo, el 94% de las compañías medianas actualizan sus sistemas regularmente.
El 56% de las medianas empresas instalan ‘parches’ de seguridad diaria o semanalmente, en comparación con el 58% de las grandes empresas.
Concienciación
El 87% de los directivos de las medianas empresas consultadas coinciden en que la ciber-seguridad es una alta prioridad, frente al 90% de las grandes empresas. Y nueve de cada diez directivos afirman estar familiarizados con su programa de privacidad de datos, frente al 91% en las grandes empresas.
El 84% de las medianas empresas hacen obligatoria la formación en concienciación sobre seguridad, un porcentaje ligeramente inferior al de las grandes organizaciones.
El 86% tienen métricas claras para evaluar la efectividad de su programa de seguridad, en comparación con el 90% de las grandes organizaciones.
Principales amenazas
Grandes y medianas empresas coinciden en señalar el ransomware como la principal ciberamenaza que podría provocar una inactividad de sistemas de más de 24 horas.
El robo de credenciales también es un problema significativo para los consultados, causando un promedio de 17-24 horas de inactividad el pasado año. En cambio, para las organizaciones con más de 1.000 empleados no resulta tan problemático.
Por el contrario, los ataques de denegación de servicio (DDoS) rara vez causan el mayor impacto para las medianas empresas. En el caso de las más grandes (más de 10.000 empleados), representa el tercer tipo de ataque más destructivo en términos de tiempo de caída de sistemas.
Tiempo de inactividad
Las medianas empresas sufren un tiempo de inactividad similar y se recuperan aproximadamente al mismo ritmo que las grandes. Cerca del 24% de las compañías consultadas se enfrentaron a tiempos de inactividad superiores a 8 horas el pasado año. Hace dos años, este porcentaje ascendía al 40%.
Fallos desvelados
El pasado año, las medianas empresas se enfrentaron prácticamente al mismo nivel de escrutinio público que sus homólogas grandes. El 59% revelaron voluntariamente su pérdida o robo de datos más significativo, frente al 62% de las grandes empresas.
Complejidad
Cuantos más proveedores de ciber-seguridad utilizan las medianas empresas consultadas, mayor es su tiempo de inactividad causado por el problema más grave. Este rango oscila entre un promedio de cuatro horas con un solo proveedor, hasta una media superior a las 17 horas con más de 50 proveedores.
Como señala Eutimio Fernández, director de Ciber-Seguridad en Cisco España, “aunque sus niveles de madurez pueden diferir frente a las organizaciones más grandes al disponer de menos recursos, las medianas empresas reconocen el valor de la ciber-seguridad y están adoptando un enfoque proactivo que al final se traduce en ventaja competitiva”.