De joya de la corona y fórmula de la Coca-Cola ha calificado la consejera delegada de Microsoft Ibérica, Rosa María García, los códigos fuente de Windows sobre seguridad puestos a disposición del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), dependiente del Ministerio de Defensa.
De esta manera, y tras firmar ayer lunes un acuerdo con Microsoft, el Gobierno español se adhiere al Programa de Seguridad para Gobiernos (Government Security Program o GSP).
El programa, al que se han sumado hasta la fecha cerca de 25 países entre los que se encuentran Australia, Reino Unido, Austria, Rusia, Finlandia, Grecia y Holanda, además de organizaciones como la OTAN o EUROPOL, fue lanzado el pasado enero de 2003 con la intención de proporcionar a los gobiernos no sólo acceso al código fuente de seguridad sino también información técnica para proteger mejor sus sistemas. Así, el acceso al código permitirá evaluar los mecanismos de los productos de Microsoft que sean considerados necesarios para incrementar la seguridad a determinados sistemas de Tecnologías de la Información de la Administración.
El acuerdo alcanzado entre el Gobierno español y la multinacional de software nace con una validez inicial de tres años y está abierto a modificaciones posteriores y a la marcha del trabajo conjunto para corregir cambios en el futuro, tal y como señala la máxima representante de Microsoft en nuestro país. El mencionado acuerdo consta de dos tipos de alianzas, la primera es el acuerdo general similar en todos los países- al que se añaden otros acuerdos específicos ligados a proyectos concretos y que requerirán autorizaciones individuales.
Con la firma de estos acuerdos, cuyo límite se sitúa en torno a cerca de 60 acuerdos con distintos gobiernos que cumplan ciertos requisitos de fiabilidad y estabilidad, explica García, Microsoft pretende aprovechar el conocimiento de expertos en materia de seguridad de la CNI para mejorar los fallos de nuestros códigos y establecer una relación más profunda entre los profesionales de seguridad del Gobierno español y los nuestros desarrolladores.
