Tercera jornada, y el tercer operador entra en acción. La ponencia de Jean Marc Vignolles(en la foto) sigue el mismo paralelismo que la que dio Antonio Coimbra en la víspera: loa de su estrategia y compromiso con las infraestructuras, la convergencia como meta ineludible y la alarma sobre el monopolio del incumbente en el ámbito de los contenidos.
De la misma manera que Vodafone alabó su adquisición por Ono, Vignolles aseguró con orgullo que la adquisición de Jazztel ha sido un “gran hito clave” para conseguir los objetivos marcados en ‘Esenciales 2020‘. Al menos sí se puede constatar que es la mayor inversión que el grupo ha realizado fuera de su territorio en los últimos diez años. Unos 3.400 millones de euros que no se fueron considerados un saldo precisamente en los mentideros de la industria.
Vignolles disparó una serie de cifras para demostrar los poderes que le otorga la adquisición de Jazztel: 5.000 millones de euros en ingresos y 1.200 millones en Ebitda; inversión anual en redes de unos 1.000 millones; compromiso de generar 1.300 millones de sinergias operativas ya identificadas; una red móvil de 4G con una cobertura del 80%de la población española en más de 900 municipios, y la fibra en más de cinco hogares de españoles.
A falta de una oferta convergente (como la de su rival Vodafone One), el directivo galo comentó que su empresa se encuentra en situación de “ser el operador alternativo de referencia en el mercado español”. Esa afirmación se sostiene en el hecho de que “somos el segundo operador de banda ancha fija en clientes; contamos ya con 2,8 millones de clientes convergentes; y en móvil, somos el tercero por número de clientes, pero lideramos el mercado 4G con 3,5 millones de clientes.
Otros objetivos que tiene en cartera la operadora pasan por un proyecto de banca móvil, acelerar el desarrollo de soluciones machine to machine e Internet de las Cosas generando un negocio de 100 millones de euros.
En relación con el ‘monopolio de facto’ en el mundo de los contenidos, el consejero delegado de Orangeapeló por que “la regulación se adapte de facto se adapte a la nueva situación competitiva. “Si antes de la adquisición de DTS (léase Canal Plus) por parte del incumbente (léase Telefónica), el entorno no era bueno, ahora la situación es crítica”.