Masorange (MASORANGE), así se denomina la nueva compañía fruto de la joint venture de Orange y MásMóvil y “nace” con un gran pan bajo el brazo: más de 30 millones de clientes y más de 7.000 millones de ingresos, una cifra que les abriría las puertas al Ibex 35 si fuera una empresa cotizada, una acción que no descartan en un futuro… En el hipotético escenario de su salida al parqué, la firma naranja tendría la oportunidad de adquirir un porcentaje más de la empresa conjunta y tomaría el control, pero este panorama no está garantizado ni confirmado todavía.
Lo que sí está claro es que la sede de la sociedad conjunta estará en Pozuelo y hasta mediados de junio se producirán los traslados desde Alcobendas de los empleados de MásMóvil. Una mudanza que no creen que acarre problemas de aparcamiento ni de espacio.
“No tenemos ningún plan previsto de salida forzosa de personal”
Meinrad Spenger
Comandada por Meinrad Spenger para el que es “un placer liderar el nuevo proyecto que no es una transacción financiera, sino una unión”, la entidad llega al mercado con un objetivo “(Re)conectar a las personas poniendo la tecnología al servicio de la mejor experiencia” y una visión “ser líderes en satisfacción de cliente, talento e impacto positivo”. Para lograr estas metas se apoyarán en cuatro valores: el cliente primero, la actitud positiva, el pragmatismo y la colaboración.
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Próximos pasos: prioridades de MASORANGE
Pero centrándonos en el presente, en el corto plazo el plan industrial de la nueva entidad tiene cinco prioridades operativas:
Ingresos
Pese a la caída del 30% del sector, se focalizarán en crecer en los segmentos de empresas y Administración Pública, así como en los nuevos servicios externos a la industria de las telecomunicaciones en los que ya tienen gran peso.
En este sentido, Spenger ha confesado que “no tenemos ningún plan previsto de salida forzosa de personal”, pero en el caso de salida voluntaria… no ha quedado claro.
Integración
Otra de las prioridades clave será materializar las sinergias (que aportará unos 500 millones a partir del cuarto año) que evite los solapamientos y duplicidades, pero que no se basan en salidas de personal -ha vuelto a reiterar-, sino en la mejor gestión de los clientes y la generación de valor.
Innovación
Sustentada en la generación de valor para lograr ser una empresa tecnológica creíble y eso implica aprovechar el talento interno y partnership. “Ahora tenemos los recursos y el tiempo para hacerlo”, ha recalcado.
Inversión
Mediante la reducción de los gastos (sin echar a gente) y otras medidas que les ayuden a ganar dinero, podrán aumentar su inversión. Con las sinergias esperan tener mucha más capacidad de inversión que se elevará a los 4.000 millones de euros en los próximos tres años y que se centrarán, sobre todo, en la creación de infraestructuras. Aunque parezca muy pretencioso, Meini ha indicado que cuenta con un buen rating y valoración en el mercado, vamos, con recursos para invertir.
Con aproximadamente 12.500 millones de deuda, tienen dos tercios asegurados contra subidas de cotas de interés. Además, para reducir el apalancamiento tienen una “política financiera muy acotada y estricta” para llegar cuanto antes -en dos en tres años- al 3,5 veces Ebitda o menos, eso significa que no se van a distribuir dividendos en los primeros años. Y, al parecer, los accionistas están alineados en esta política.
Impacto positivo
Esta prioridad contempla reforzar las iniciativas de voluntariado, la apuesta por la sostenibilidad y el talento.
Comité ejecutivo de Masorange
- Meinrad Spenger, consejero delegado
- Ludovic Pech, director financiero
- Germán Lópoez, director de operaciones
- Miguel Santos, director de tecnología
- Mónica Sala, directora de red
- Mónica Allés, director de personas
- Julio Gómez, director de Estrategia y Wholessale
- Diego Martínez, director de Cliente y Producto
Líder en el sector telco español, multimarca y con foco en otros servicios
Durante la presentación a la prensa de la nueva identidad corporativa y su estrategia, Masorange surge como un “nuevo líder en el mercado de las telecomunicaciones” por muchos aspectos como su elevado número de abonados (con más de 30 millones de línea móvil y más de 7 millones de líneas de banda ancha, principalmente fibra); una gran aceptación por parte de sus clientes -liderando el ranking de satisfacción que “será parte de nuestro ADN en el futuro”-; buena cobertura con despliegues en más de 29 millones de hogares en España con red propia y acuerdos con terceros; progresos en 4G y 5G; y con un gran canal retail y con 4,2 millones de dispositivos electrónicos vendidos.
En su haber cuenta con 9 marcas de alcance nacional y 5 líderes regionales, que la compañía las mantendrá al igual que sus tarifas, aunque se gestionarán de forma unificada.
Asimismo, el giro hacia empresas de servicios que ambas operadoras han realizado durante estos años ha dado sus frutos y seguirán prestando atención a estos sectores que continúan creciendo. Hablamos de los servicios financieros, venta de dispositivos, energía, IoT, telemedicina, seguros, alarmas y seguridad y centro de entretenimiento.
Nueva identidad corporativa
Respecto a la nueva identidad corporativa, simbolizada con un + y una letra O, Germán López ha explicado que supone la culminación de dos entidades y de dos equipos y que con ella querían que fuese sinónimo de innovación y representase a todas y todas mediante una marca sencilla y creíble.
Flecos por pulir
Sabemos nombre, ubicación, planes estratégicos, comité ejecutivo… pero todavía quedan algunos flecos por pulir como la integración de sistemas, futuros planes para la plataforma de entretenimiento o el tema del excedente de espectro. Sobre este asunto Meini ha explicado que todavía el Gobierno otorga un plazo de unos seis meses para esta transferencia y que desde Masorange tienen claro que “no van a transferir más espectro del necesario” ya que mayor cantidad de este recurso les concederá más capacidad para ofrecer más productos y servicios al mercado.
Colaboración que viene de largo
Sea como fuere, la “unión” de Orange y MásMóvil viene de largo, como ha expresado el ya CEO de la nueva sociedad. Precisamente, en 2008 se produjo el lanzamiento de MásMóvil como OMV y desde ese año estuvieron colaborando con Orange y disfrutaron de los remedies de la compra de Jazztel. Asimismo, desde 2015 han estado colaborando en fibra, con el despliegue de 10 millones de hogares juntos. “Así que ha sido bastante natural esta consolidación con este buen rollo, aunque resultó un proyecto más largo de lo esperado”. Pero por fin ha concluido el proceso y “estrenamos futuro porque creemos que este proyecto es una gran oportunidad“, ha manifestado.
