El viernes BlackBerry sorprendió con la presentación de un teléfono que no tiene como base su sistema operativo, sino Android. El dispositivo se llama Priv, y, según la compañía, “combina lo major de la seguridad y la productividad de la gama Blacberry con el ecosistema en expansión de aplicaciones para Android”. Así lo comunicó el CEO de la compañía, John Chen, en una reunión con inversores.
El aparato llegará al mercado a finales de este año, y será vendido en tiendas físicas y por Internet. Además, según la publicación de canal CRN, todavía la compañía no ha confirmado si el nuevo dispositivo con Android será vendido a través del canal de distribución.
A falta de detalles definitivos, CRN también especula, citando una información del Wall Street Journal, con que el Priv tendrá un acabado curvo en la pantalla, al estilo del Galaxy S6 Edge, un teclado qwerty deslizable y una cámara de 18 megapíxeles.
El anuncio llega, además, después de que el fabricante canadiense reportara unos pobres resultados correspondientes al segundo trimestre de su ejercicio fiscal, que terminó el 29 de agosto. En concreto, BlackBerry reconoció pérdidas de 13 céntimos por acción y unos ingresos totales de 490 millones de dólares, 110 millones menos que lo previsto por los analistas, que también pronosticaban beneficios en el periodo.