Un tercio de los españoles quieren borrar sus datos de Internet. Así lo pone de manifiesto una investigación realizada por NordVPN en colaboración con Incogni, una empresa de gestión de información online. Una tendencia al alza que se ha dado a escala global en tanto en cuanto se ha pasado del 30% al 35% con Estados Unidos y Canadá encabezando la lista.
En España también se ha incrementado. En concreto, el 59% -frente al 44% de 2022-, se sienten utilizados por las empresas que recopilan, venden o simplemente utilizan sus datos para ganar dinero. Es más, un cuarto cree que alguien acabará hackeando sus dispositivos.
Asimismo, el 46% de los españoles considera que no se justifica que sus nombres estén en internet: el 25%, simplemente, no confía en la nube y un tercio tiene miedo de que esa información termine siendo utilizada en su contra.
“El cambio de actitud de muchos usuarios, que cada vez buscan más formas para borrar su información personal de internet, pone de manifiesto una tendencia: ya no se acepta que la información digital esté disponible permanentemente. Los titulares desean tener más control sobre sus datos y garantizar el derecho al olvido”, afirma sobre el particular Marijus Briedis, CTO de NordVPN.
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Los datos que desean borrar los usuarios
Los datos de la investigación muestran que más de la mitad de la población española (el 56%) desea borrar sus datos bancarios de la nube. A esto se une los que quieren eliminar para siempre sus perfiles en apps de citas o redes sociales, cerca del 25% de los encuestados. Sin embargo, el 46% reconoce que no cuenta con los conocimientos necesarios para hacerlo.
Los usuarios desean borrar perfiles en apps de citas, redes sociales y banca electrónica, así como vídeos o mensajes que ponen en riesgo la reputación del usuario
Por otra parte, al 40% de los españoles no le gustaría que otra persona se enterara de sus condiciones médicas, así como la identidad de su pareja u orientación sexual. Y de forma recíproca, ya que la mitad de los encuestados no siente interés por los datos digitales de terceros, nunca buscan este tipo de información en la red.
“En un mundo cada vez más digitalizado, muchas personas están tomando consciencia del peligro que corre su privacidad digital. De ahí que aumente el interés por la negación online sin rastreo. A medida que avance la tecnología, se irán implementando nuevas medidas de protección de los ciudadanos”, concluye Briedis.
Pese a que esta opción aún no existe, un tercio de los españoles estaría dispuesto a pagar hasta 100 euros por utilizar internet desde el anonimato. El 2% llegaría a los 500 euros, aunque la mayoría, alrededor del 62%, afirma que jamás gastaría dinero en esto.
¿Cómo se puede proteger la privacidad en internet?
Marijus Briedis de NordVPN comparte algunos consejos para protegerse en internet:
- Compartir menos datos personales. Por ejemplo, configurar la privacidad en los perfiles de redes sociales para que solo amigos y familiares puedan ver las publicaciones.
- Usar una VPN. Las redes privadas virtuales encriptan el tráfico web y lo transmiten a través de un servidor remoto, lo que lo hace más seguro y privado.
- Aumentar la protección de las cuentas. Utilizar contraseñas seguras y activar la autenticación multifactor sirve para añadir una capa adicional de seguridad.
- Renunciar a los intermediarios de datos y recurrir a bróker de datos. A pesar de que solo el 13 % de los españoles sabe lo que es un bróker de datos, este tipo de empresas recopilan información privada, que después utilizan para construir un perfil publicitario.
“Muchas personas entienden el papel de los intermediarios en el tratamiento de datos, pero sigue siendo crucial concienciar sobre cómo esta información personal puede acabar en manos las manos equivocadas”, declara Darius Belejevas, responsable de Incogni.
Metodología: Esta investigación fue encargada por NordVPN y realizada por Cint entre el 28 de junio y el 10 de julio de 2024. Se encuestó a un total de 6800 personas de EE.UU., Reino Unido, Canadá, Alemania, Francia, España e Italia, mayores de 18 años. Los investigadores establecieron cuotas en función del género, la edad y el lugar de residencia para lograr una muestra representativa a nivel nacional entre los usuarios de internet.