ZTE ingresó 3.836 millones de euros en el primer trimestre de 2023, lo que supone un aumento interanual del 4,3%.
Asimismo, la compañía alcanzó un beneficio neto de 272,9 millones de euros, lo que supone un aumento interanual del 19,2%. Mientras que el beneficio neto después de partidas extraordinarias fue de 270 millones de euros, un incremento del 25,7%.
Por otra parte, los flujos de caja netos procedentes de actividades de explotación aumentaron un 95,9%, hasta 268 millones de euros, en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Precisión y pragmatismo: ejes de la estrategia de ZTE
Además de la presentación de sus resultados trimestrales, el proveedor ha anunciado las claves de su estrategia de crecimiento. Tal y como indica en el comunicado remitido, “el año 2023 continúa desarrollándose en un entorno externo complejo y volátil, lo que plantea grandes retos a las operaciones empresariales corporativas”, indican. Para hacer frente a esta situación, ZTE ha adoptado la estrategia empresarial de “precisión y pragmatismo para un crecimiento estable”. La compañía pretende así mejorar su previsión, resistencia y adaptabilidad a la incertidumbre con “un posicionamiento de negocio preciso, que asigne los recursos de forma eficiente y que optimice los procesos de forma continua”.