Con esta inversión, Verizon pretende que la mayor parte de las grandes ciudades de Estados Unidos disfruten de unas velocidades de transmisión de datos entre 300 y 500 Kbps en el verano de 2004.
Con este objetivo, la compañía comenzó a desarrollar las primeras pruebas piloto en la capital estadounidense el pasado mes de octubre, con la colaboración de Lucent Technologies, mientras en San Diego han desarrollado el programa piloto junto a Nortel Networks.
Mediante la tecnología BroadbandAccess, basada en CDMA, la compañía pretende proporcionar a sus clientes (tanto particulares como empresariales) un nuevo nivel de comunicaciones móviles, en la que se incluyen además de gran velocidad, contenidos gráficos, vídeo y música entre otras posibilidades.