Los empresarios del sector de servicios TIC recobran el optimismo que le caracterizaba antes de la pandemia con una fuerte subida de las expectativas de recuperación de la facturación y de la contratación neta de talento especializado a corto plazo.
Según la última entrega del barómetro mensual TIC Monitor, elaborado conjuntamente por VASS y el Centro de Predicción Económica CEPREDE, en ambos aspectos, los indicadores de clima experimentan un gran crecimiento respecto al mes anterior.
En lo referente a la evolución de la actividad, el indicador se duplica, pasando de los +30,8 puntos a los +63,1 puntos (en una escala +/-100), el mejor registro obtenido desde mayo de 2019 y que, además, es significativamente superior al del promedio de la UE, que, aunque también mejora, se sitúa en los +42,9 puntos. Es decir, el 81,6% de las compañías españolas espera un crecimiento de facturación entre noviembre de 2021 y enero de 2022.
En esa misma línea, el indicador de contratación laboral a corto plazo marca niveles récord en los últimos 22 meses, situándose en los +51,4 puntos (en una escala +/-100). Esto significa que el 75,7% confía en una gran mejora de la situación laboral para el inicio del nuevo año.
“Como vaticinábamos en nuestra última entrega, este contexto de crecimiento ha vuelto a equilibrar la ratio de productividad del trabajo que, aproximada a través de la facturación por empleado, ha estado en terreno negativo a lo largo de la crisis”, señala Antonio Rueda, director de VASS Research y responsable de TIC Monitor.
Al igual que con las expectativas de los empresarios, esta recuperación también se ve reflejada en los indicadores de evolución de la cifra de negocio y de la demanda de talento especializado.
La cifra de negocio encadena seis meses de crecimiento, con un aumento en los últimos 12 meses –desde agosto de 2021 a agosto de 2020– del +12,6%. Asimismo, la creación de empleo continúa imparable y la demanda de talento especializado logra un crecimiento interanual del +5,5%, batiendo la mejor marca de los últimos 33 meses.
“El problema sigue estando, y se hace cada vez más patente, en la escasez de talento cualificado. Ello se traduce en niveles de rotación anormalmente elevados, y unos inquietantes síntomas de inflación salarial. En el sector TIC, desde el inicio de la pandemia hasta el segundo trimestre de 2021, los costes salariales totales han crecido casi un 7%. Además, los rebrotes inflacionistas son ya una realidad y en este sector parece abrirse un nuevo foco de desequilibrio que terminará por afectar a los precios finales de los proyectos de digitalización”, explica Rueda.