La multinacional ha desarrollado en España un modelo de colaboración tecnológica que permite que las pequeñas y medianas empresas (pymes) innovadoras puedan hacer realidad sus proyectos tecnológicos.
Con esta política comercial, Sanmina-SCI quiere eliminar las barreras de entrada que habitualmente encuentran la pymes, tales como las dificultades para encontrar quién fabrique los prototipos; para el suministro de componentes al mejor precio; falta de experiencia a la hora de mejorar el diseño del producto final, que optimice costes y simplifique su producción, etcétera. Asimismo, Sanmina-SCI ofrece a las pymes la posibilidad de fabricar los productos “bajo demanda”, en tiradas cortas, eliminando así stocks, costes innecesarios derivados de los inmovilizados y facilitando la actualización tecnológica permanente de los productos, “time to market”, ganando competitividad en el mercado frente a la competencia.
El “modelo” Sanmina-SCI aporta diversidad de soluciones, según las necesidades tecnológicas propias de cada cliente, que en cada caso son personales y únicas. Para ello la compañía estudia previamente las peticiones concretas de fabricación, aporta nuevas infraestructuras para que el producto tenga mejores aplicaciones y un coste más reducido, y ofrece novedosos procesos de producción.