El negocio de los wearables, de los dispositivos para llevar encima (en la muñeca en forma de reloj o adheridos a la ropa), es uno de los que mejores perspectivas de venta presenta para los próximos años. Según IDC, antes de que finalice 2015 se habrán vendido más de 45 millones de wearables en todo el mundo, y 8 de cada 10 de estos dispositivos se llevarán en la muñeca. Strategy Analytics adelanta que en 2020, las ventas anuales de wearables alcanzarán los 169 millones de dispositivos, y de esos, 100 millones de unidades corresponderán a smartwatches y otros dispositivos de pulsera.
Samsung quiere reeditar en el ámbito de los relojes el protagonismo que tiene en el mundo de los teléfonos móviles, donde encabeza los rankings de venta desde hace años. Y para ello empieza a vender en España el Gear S2, segunda versión del smartwatch pionero que lanzó en 2013. Hay que decir que la firma coreana ha pulido aspectos de diseño y funcionamiento y el Gear S2 proporciona una mejor experiencia a la hora de acceder a la información y a las aplicaciones, y, gracias a su pantalla circular con bisel giratorio, simplemente queda mejor en la muñeca. Lo que no es un asunto menor en un artículo, el reloj, tan dependiente de las modas y del gusto de quien lo lleva encima.
Al no llevar SIM incorporada, el Gear S2 sigue siendo un notificador de lo que está pasando en el teléfono móvil (que tiene necesariamente que llevar versiones superiores a 4.4 y una memoria RAM de 1,5 GB o más). Además, Samsung ha provisto a su aparato de abundantes prestaciones para el control del ejercicio físico, pues incorpora pulsómetro y trae de serie apps como la de Nike o la propia de Samsung para entrenamientos.
El diseño del Gear S2 es elegante y destaca por su pantalla circular (Super AMOLED de 1,2 pulgadas) con bisel giratorio y los botones ergonómicos laterales para ir a la pantalla de inicio o a la anterior. La compañía asegura que la duración de la batería puede llegar a los tres días, al término de los cuales el dispositivo se recarga tras reposar, sin necesidad de conectar cables, en una pequeña cuna durante dos horas.
También hay que decir que el Gear S2, que está gobernado por un procesador de doble núcleo (a 1 GHz) y tiene 4 GB de almacenamiento, confirma la apuesta de Samsung por su propio sistema operativo, Tizen, en detrimento de Android Wear. Además, el aparato integra la tecnología NFC, que permitirá realizar pagos desde el teléfono o desde el propio reloj.
En este sentido, Celestino García, vicepresidente corporativo de Samsung España, aseguró en la presentación del reloj que el método de pago Samsung Pay llegará “muy pronto a España”, posiblemente en Navidades. Por otro lado, la compañía asegura que está estudiando la compatibilidad de su Gear S2 con los teléfonos de Apple.
Los precios de venta de referencia de las dos versions del Gear S2 son 349 euros para la estándar (con acabado de aluminio y pulsera de plástico en varios colores) y 379 euros para la Classic (con cuerpo negro brillante y correa de cuero). Aunque oficialmente, la compañía no ha dado previsiones de venta, fuentes próximas adelantaron a CHANNEL PARTNER que el objetivo es comercializar entre 30.000 y 40.000 smartwatches desde finales de octubre y hasta la campaña de Navidad.
Desarrollo de aplicaciones en España
En la presentación del Samsung Gear S2 en Lisboa, Celestino García y su equipo recalcaron el protagonismo de España en el mundo del desarrollo de aplicaciones para Tizen. Y es que, según Samsung, los desarrolladores españoles aportan el 10% de todas las aplicaciones para smartwatches de la compañía. No en vano, Samsung está colaborando ahora mismo con Iberia y Renfe para que los viajeros pueden llevar su billete en su nuevo reloj. También se prepara una app (LaLiga) que permitirá tener información de los partidos y los jugadores de la Liga BBVA. Asimismo, diseñadores como Ágatha Ruiz de la Prada o Ángel Schlesser han llevado sus creaciones al Gear S2 en forma de fondos de pantalla.
