MTP ha anunciado el lanzamiento de Omniatest, una nueva metodología que optimiza el proceso de pruebas del software. Omniatest, que MTP aplica a todos sus proyectos de pruebas incluyendo factoría, está basada en los parámetros definidos por el ISTQB (International Software Testing Qualifications Board), está certificada en el Nivel 3 del Modelo TMMI y actualmente se encuentra en proceso de adecuación al Nivel 4.
Esta nueva metodología abarca el proceso completo de la actividad de pruebas del software, incluyendo todos los niveles, desde la revisión de requisitos hasta las pruebas postproducción. Hace especial hincapié en la gestión de los proyectos de pruebas, e incrementa sustancialmente la flexibilidad de los recursos dedicados y la coordinación de los equipos. La metodología Omniatest, que ya está institucionalizada en la factoría de pruebas de MTP, asegura a los clientes una mayor eficacia en el desarrollo de las pruebas de calidad del software.
Mamdouh El Cuera, director de Operaciones de MTP, afirma que “gracias a la aplicación de esta nueva metodología podemos garantizar a nuestros clientes los más altos estándares de calidad a la hora de realizar las pruebas necesarias para comprobar el estado de sus tecnologías, algo que redundará directamente en la mejora de costes, plazos en los proyectos de desarrollo y ciclo de vida de sus productos de software”.
Por su parte, Juan Manuel Ferrer, director general de MTP, comenta que “la especialización y la independencia que mantenemos frente a cualquier desarrollador de software, así como un equipo formado por más de 400 ingenieros con una alta cualificación técnica, son los pilares sobre los que MTP apoya su estrategia de negocio y que suponen la mejor garantía a la hora de asegurar la calidad de las soluciones de software de nuestros clientes. Estamos seguros de que Omniatest va a representar un significativo avance en la evolución global de los procesos de testing”.
Omniatest está estructurada en una serie de fases que, a su vez, se componen de un conjunto de procedimientos, herramientas, plantillas y guías. De esta forma, contempla una fase de Planificación donde en primer lugar se analizan los riesgos de producto y se determina la viabilidad, el alcance, y el objetivo de las pruebas con el fin de realizar una previsión de los recursos necesarios para su realización. Además recoge el Master Test Plan que engloba todos los niveles de pruebas.
La fase de Análisis y Diseño incluye un estudio de la documentación en base a la cual se generan los casos de prueba, aplicando las técnicas de diseño adecuadas. Los casos de prueba se trazan con los requisitos del sistema y los riesgos de producto detectados en la fase de Planificación.
La fase de Implementación y Ejecución tiene como objetivo principal ejecutar casos de prueba, registrando y analizando los resultados e incidencias y comparando dichos resultados con los esperados. Tras la fase de evaluación, en la que se analizan los criterios de finalización definidos, se aborda la fase de Cierre, en la que se recogen las lecciones aprendidas.
En paralelo a las fases anteriores, la fase de Monitorización y Control monitoriza y controla el proyecto para asegurar el cumplimiento de todos aquellos parámetros definidos durante la Planificación y gestionar las incidencias de proyecto que puedan surgir.
Todo el proceso se encuentra articulado en una herramienta de creación propia que permite planificar, monitorizar, controlar y recoger los resultados de los proyectos de pruebas.
