Flint se unió al equipo de Sony Ericsson dejando su puesto en Sony Europa en 2004. Bajo su liderazgo, la compañía alcanzó el cuarto puesto de la industria de dispositivos móviles, según afirman fuentes de firma, por detrás de Nokia, Motorola y Samsung. En el segundo trimestre del año, Sony Ericsson consiguió un crecimiento del 55 por ciento en sus beneficios hasta llegar a los 327 millones de euros, aunque a pesar de ello no llegó a cumplir con las expectativas del mercado.
Komiyama ha manifestado que la industria de dispositivos móviles afronta un momento de fascinantes desarrollos, gracias a la convergencia de las tecnologías de audio y vídeo y las comunicaciones móviles. “Los nuevos servicios y aplicaciones son cada vez más importantes tanto para operadores como para consumidores y mi objetivo es llevar a Sony Ericsson mi propia experiencia en marketing de consumo así como un profundo conocimiento de las relaciones de los consumidores”, declaró el nuevo presidente.