La gran mayoría de empresas están de acuerdo con que el paso a la nube ha reducido cuellos de botella en sus operaciones, ha aumentado su agilidad y se han reducido costes. El cloud computing se ha convertido en una herramienta con la que pymes, profesionales y emprendedores pueden ahorrar dinero y ver aumentada su competitividad.
Frente a las nuevas necesidades que presentan las empresas, sobre todo aquellas que mensualmente gastan una media de más de 500 euros al mes en servicios de hosting y que requieren gran capacidad de rendimiento y predictibilidad, nace Digital Valley. La tecnológica pone a disposición de los clientes un abanico de servicios entre los que destaca el cloud dedicado, que es un tipo de cloud donde los recursos de hardware no se comparten con otros usuarios pero sigue estando en la nube.
La tecnológica, que invirtió cerca de 400.000 euros para el cloud dedicado, se distingue por ofrecer servicios de cloud hosting de alto rendimiento, a un precio imbatible y con un soporte técnico altamente especializado.
“El cloud dedicado es perfecto para consolidar servidores, escalar con facilidad y mantener el nivel de rendimiento que pueden obtener con servidores dedicados pero a un precio más económico y con las ventajas del cloud computing. Por eso decimos que en cloud dedicado eliminamos las desventajas del cloud público y mantenemos sus beneficios: mayor estabilidad, flexibilidad, privacidad y personalización”, explica Oscar Montero, CEO de Digital Valley.