Desde Hewlett-Packard han confirmado oficialmente, esta misma mañana, el abandono de la compañía por parte de Carleton S. Fiorina, hasta ahora consejera delegada y Chief Executive Officer (CEO) de la multinacional, que deja ambos cargos con “efecto inmediato”.
La corporación ya se ha puesto manos a la obra para buscar a la persona adecuada que cubrirá el puesto dejado por Fiorina y, en el mismo comunicado donde se anunciaba la salida de la hasta ahora máxima responsable de HP, el equipo directivo presenta a Robert P. Wayman hasta ahora Chief Financial Officer (CFO)-, como nuevo CEO en funciones, además de nombrar a Patricia C. Dunn como consejera delegada no ejecutiva (non-executive chairman of the board).
En sus primeras declaraciones tras renunciar a su cargo en HP, Carly Fiorina ha declarado que aunque lamenta “abandonar el consejo, tengo diferencias sobre cómo ejecutar la estrategia de HP, pero respeto su decisión” refiriéndose al consejo-. Al tiempo que ha añadido que “HP es una gran compañía y deseo a toda la gente de HP mucho éxito en el futuro”.
Por su parte, Patricia C. Dunn ha comentado que “Carly Fiorina llegó a HP para revitalizar la compañía. Fiorina tuvo una visión estratégica y diseñó un plan que ha dado a HP las capacidades adecuadas para competir y ganar. Nosotros le agradecemos a Carly, por su significativo liderazgo en los últimos seis años y por haber acelerado la ejecución de la estrategia de la compañía”.
El nuevo CEO, Wayman, ocupaba el puesto de CFO de HP y lleva 36 años en la compañía, mientras que Patricia C. Dunn es directiva de la multinacional desde 1998.
El mercado no ha tardado en reaccionar al anuncio del cambio en la cúpula de HP y, de momento, en plataforma de “fuera de hora” de negociación bursátil los títulos de la multinacional se han elevado un 10 por ciento hasta los 22,2 dólares.
Por su parte, los analistas recuerdan que la salida de Carly Fiorina, cabeza visible de la operación de compra de Compaq por parte de HP en marzo de 2002, es bastante significativa teniendo en cuenta que el pasado mes de agosto ante la presentación de los resultados del tercer trimestre la entonces consejera delegada y CEO de la multinacional advirtió de que realizaría “cambios inmediatos en la dirección” a la vista de las cifras y se quejó de la “inaceptable ejecución” de operaciones en la división de servidores y almacenamiento.
