Todos estos nuevos chips están diseñados según la nueva formula de fabricación de transistores de 45nm de la compañía, que mejora la velocidad de los ordenadores, reduce el gasto de energía, incrementa la vida de las baterías, es respetuosa con el medio ambiente y presenta una reducción del tamaño del encapsulado, para permitir diseños portátiles más compactos. Con la introducción de estos procesadores, Intel está ofreciendo actualmente un total de 32 productos para sobremesa, portátiles y servidores, basados en esta solución.
Los procesadores son hasta un 25 por ciento más pequeños que las versiones anteriores, por lo que los fabricantes pueden diseñar ordenadores portátiles todo en uno para los consumidores más móviles. De estos 16 nuevos productos, doce corresponden a los segmentos de sobremesa y portátiles y cuatro a servidores. Ninguno de ellos contiene plomo y, comenzando este año, también están libres de halógeno, respetando así el medio ambiente.