El ritmo de los cambios que se están produciendo debido a la tecnología no tiene precedentes. El poder transformador y el alcance de nuevas tecnologías como Inteligencia Artificial (IA), 5G, Internet de las Cosas y Big Data era muy difícil de imaginar hace 30 años. Y por eso están llamadas a remodelar nuestro futuro digital mientras nos movemos rápidamente hacia la cuarta revolución industrial. Estas tecnologías impulsarán el crecimiento en todas las industrias y sectores, puesto que ofrecerán múltiples nuevas oportunidades para los proveedores TIC. De hecho, la siguiente generación de infraestructura TIC que ya se está construyendo liderará la evolución de ciudades inteligentes y sostenibles en todo el mundo. Hoy en día, la conectividad no solo significa conectar personas. Las telecomunicaciones van más allá, facilitando un amplio abanico de servicios para mejorar la vida de las personas a una velocidad y escala nunca antes vistas.
Colaboración público-privada
En la medida en la que la tecnología avanza, tanto las Administraciones Públicas, como organizaciones internacionales y sector privado tendrán que empezar a trabajar y colaborar juntos para ayudar a encaminarnos hacia la llamada cuarta revolución industrial o Industria 4.0. Esto significa que es necesario crear un escenario habilitador, que implique una estrecha colaboración entre todos los actores para las áreas regulatorias y normativas, y a todos los niveles: regional, nacional y global.
Por eso, asociaciones como la ITU desempeñan un rol importante para hacer que los jugadores clave de toda la industria puedan llegar a un consenso respecto a posibles problemas o al posible impacto de las tecnologías emergentes en nuestra sociedad. La experiencia de ITU como organismo especializado de las Naciones Unidas para las Tecnologías de la Información y la Comunicación, facilita la reunión de una audiencia internacional única tanto de mercados emergentes como maduros de todo el mundo. Los jefes de Gobierno, junto con ministros y demás autoridades competentes, además de responsables legislativos y altos ejecutivos de compañías multinacionales, se reúnen en la asociación para debatir en torno a relevantes temas como la regulación colaborativa, coches conectados, la seguridad en la era digital o Inteligencia Artificial, entre otros.
El auge del 5G
Nos aproximamos a 2020, y el trabajo que viene desempeñando la ITU en torno a la estandarización internacional de los sistemas 5G es crucial. Ya hemos fijado una serie de objetivos a conseguir en cuanto a rendimiento de 5G, con la intención de preparar el terreno para nuevas aplicaciones, como conducción autónoma, cirugías médicas en remoto, robótica colaborativa, y Realidad Virtual avanzada. El apoyo de la ITU para el desarrollo de un ecosistema 5G que facilite el acceso a comunicaciones altamente fiables será la clave de la innovación para cada sector industrial. Y es que la tecnología 5G está llamada a facilitar velocidades hasta 100 veces superiores frente al actual 4G LTE, y la escala de la infraestructura deberá estar acorde con esas nuevas exigencias, una inversión que será enorme, y costosa. En este caso, también los acuerdos de colaboración público-privada serán cruciales para desarrollar el 5G a todos niveles, especialmente en aquellas zonas de difícil acceso a cobertura por su situación demográfica y topográfica, algo que será un auténtico reto que condicionará la progresión de este mercado en el futuro.
Fomento de nuevos desarrollos
Existen desarrollos muy interesantes, a medida que los proveedores de redes adoptan la transfor-mación digital para servir mejor a más clientes de una manera ágil y rentable. Pero debemos perma-necer atentos, y recordar que, si bien las nuevas tecnologías crean nuevas oportunidades, también son disruptivas, lo que puede, en ocasiones, ge-nerar cierta preocupación en la población sobre una variedad de cuestiones, como pueden ser los cambios en los puestos de trabajo o la privacidad y seguridad. Esperamos que las transformaciones digitales en curso permitan a los proveedores ir más allá de simplemente conectar personas entre sí. También esperamos que los cambios den rien-da suelta al poder sin precedentes de las tecnolo-gías emergentes para mejorar la vida cotidiana de las personas, incluida su salud, bienestar, empleos y acceso a servicios financieros de la manera más segura posible. l
