Aunque en los últimos tiempos el mercado mundial de los teléfonos inteligentes se ralentiza irremediablemente, las ventas en el último trimestre del año se aceleraron con motivo de la campaña navideña y subieron un 6,9%, hasta totalizar 428,5 millones de dispositivos, según IDC. En todo el año se comercializaron 1.470 millones de aparatos, lo que supone un récord histórico, pero sólo es un 2,3% más que lo registrado en 2015. Hay que recordar que en 2015, el mercado subió un 10,4% con respecto a 2014.
El 2016 fue el primer año de caída del iPhone (un 7% en el último ejercicio), aunque Apple acabó la recta final del ejercicio, marcada por la campaña navideña, creciendo casi un 5% y superando a Samsung a la cabeza del ranking de fabricantes. La coreana cayó un 5,2% entre octubre y diciembre y estuvo por debajo del 20% de cuota por primera vez en cuatro años. En todo el ejercicio, Samsung comercializó 311 millones de celulares, un 3% menos que en 2015. En cualquier caso, IDC señala que, a pesar del fiasco del Galaxy Note 7 y de la presión de las marcas chinas, Samsung ha logrado capear el temporal con el Galaxy S7 y con la popular J-Series. También ha sido relevante en el año la subida de Huawei, que se ha consolidado entre los tres primeros proveedores.
Para 2017, IDC espera que la demanda de iPhone vuelva a la senda positiva. Además, también prevé una recuperación del mercado de la telefonía en regiones en las que se esperaba más el pasado año, como Medio Oriente/África y Latinoamérica. Como consecuencia de todo ello, la consultora espera que las ventas mundiales de celulares inteligentes crezcan por encima de ese 2,3% que marcó la evolución en el último ejercicio.
En los últimos trimestres también está siendo relevante la presión que están metiendo los fabricantes chinos a las dos primeras marcas. En concreto, Huawei, Oppo y Vivo ganan terreno en su país de origen gracias sus amplios catálogos de dispositivos bien diseñados y a precios asequibles, según IDC. En todo caso, desde la consultora explican que estas marcas, sobre todo Oppo y Vivo, necesitarán darse a conocer en el exterior para de verdad poner en entredicho el liderazgo mundial de Apple y Samsung.