La explosión en el uso del video y servicios cloud está creando toda una nueva dinámica en el tráfico de la red, caracterizada por un uso intensivo del ancho de banda y de aplicaciones de datos asimétricas como ocurre con los servicios de streaming de vídeo.
Los hábitos del consumidor están cambiando de forma muy rápida y drástica. El vídeo ha pasado de ser una actividad “familiar” y colectiva a convertirse en una experiencia individual, lo que se ha traducido en una aceleración en el consumo de ancho de banda gracias a las simultáneas descargas que ahora se producen en un mismo domicilio.
Y aunque el tamaño y la impredecible naturaleza de la dinámica y los flujos del nuevo tráfico, están siendo los motores que promueven la transformación de las redes de transporte óptico utilizadas, tampoco podemos olvidar que tanto los proveedores de servicio móvil como fijo, se están viendo presionados para ofrecer una mejor experiencia de video (QoE) a sus clientes y aumentar sus ofertas de servicio cloud.
El principal reto con el que estos proveedores de servicio se enfrentan actualmente es el de saber adaptarse a ese crecimiento exponencial en el tráfico de datos, al mismo tiempo que deben contener y reducir sus costes operativos y de capital para asegurar su rentabilidad y crecimiento.
Es necesario transformar la red óptica
Estas nuevas dinámicas del mercado fuerzan a que en toda la infraestructura de la red óptica, desde el acceso hasta el núcleo DWDM de gran capacidad para larga distancia. tenga lugar una importante transformación.
La innovación en la capa óptica está atravesando uno de sus mejores momentos, lo que es una excelente noticia. Entre estas innovaciones que están surgiendo podemos resaltar las técnicas de modulación adaptativa que nos aportan una mayor capacidad, la mejora de la agilidad de la capa óptica gracias a las soluciones multip-layer Software Defined Networking (redes definidas por software), y también la integración IP y óptico para mejorar las eficiencias.
Esta transformación de la red óptica cuenta con tres elementos claves:
1. Mayor capacidad/escalabilidad de la capa óptica
- Gracias a una mayor velocidad, pasando desde los 10 G a unas velocidades consistentes de 100G o superiores.
- Transmisión de alta capacidad y baja latencia, crítica para satisfacer las necesidades cambiantes de capacidad y QoS de las aplicaciones para usuarios finales, como es el vídeo HD / OTT (Over The Top).
- A medida que empresas y consumidores dependen más de la nube para todo, estas necesidades de transmisión a mayor velocidad aparecen de nuevo en las velocidades de interconexión óptica necesarias para la conectividad de los centros de datos (centro de datos a centro de datos, empresa a centro de datos).
- La innovación en formatos de adaptación modulativa está preparando el camino para transmisiones a velocidades superiores (200G, 400G, etc).
- El escalamiento en la capa óptica ofrece una mejora en la relación coste por bit.
- Mejoras en la latencia y en respuesta inmediata.
… pero no se trata únicamente de capacidad, la nueva generación de redes ópticas necesitan ser más ágiles y adaptables para asegurar una distribución fiable y eficiente de capacidad de servicio en un mundo de comunicaciones bajo demanda.
2. Mayor flexibilidad en la capa óptica
- Extremo a extremo dinámico y control multi capa vía SDN, que se traduce en una red óptica más programable y automatizada, unos procesos de trabajo con costes de funcionamiento optimizados (NMS, SDN y planificación), una reducción en la complejidad, etc.
- El software inteligente transforma las tradicionales redes ópticas estáticas en redes más dinámicas, ágiles y adaptables, alineadas con las demandas de nuevo tráfico.
- También permite un suministro extremo a extremo más rápido y unos nuevos servicios empresariales gracias a una programabilidad de red simplificada (NaaS, BoD).
- Innovaciones como los Pluggable Optical Layer, un nuevo enfoque de las redes metro ópticas, desglosan la capa óptica en pequeños dispositivos agregables, haciéndola más flexible preparada para futuros desarrollos.
3. Mejoras en eficiencias multilayer
- La transformación de la red óptica requerirá una integración más estrecha de las capas IP y ópticas para permitir eficiencias y mejoras en la utilización de recursos de red.
- Tanto IP como óptico son elementos críticos en la red para par la implantación de servicios, aunque tradicionalmente han jugado un papel secundario debido en gran medida a su planificación y diseño separados, así como a su interconexión estática y limitada.
- Una unión más estrecha entre capas/dominios IP y óptico utilizando sistemas de control óptimo, así como planificación multi capa y capacidad de optimización, contribuirá a maximizar la eficiencia total de la red al mismo tiempo que minimiza la latencia del tráfico, posibilitando nuevas soluciones que permitan una combinación óptima de calidad de experiencia para usuarios finales con el menor coste para los proveedores de servicio.
- Un ejemplo práctico lo tenemos en la combinación de enrutamiento IP con los dispositivos ópticos agregables antes mencionados, que mejoran la flexibilidad y la eficiencia en aplicación de red troncal móvil LTE/LTE-A
Los avances en las tecnologías de redes ópticas están marcando el camino para una red de infraestructura de banda ancha de próxima generación, con niveles de escalabilidad, flexibilidad y eficiencia hasta ahora desconocidos. Estas innovaciones son críticas para poner en marcha los cambios necesarios en esta nueva época de comunicaciones en la nube bajo demanda que están cambiando, a toda velocidad, la forma en la que vivimos, trabajamos y nos entretenemos.