Cinco meses han pasado ya desde que el Gobierno sentase las bases de la tan esperada apertura del bucle local, el tramo de línea telefónica que llega directamente al hogar del abonado y último reducto del monopolio de Telefónica.
A día de hoy, sin embargo nos encontramos con que el proceso de liberalización no ha llegado más allá del primer punto en las negociaciones entre Telefónica y sus competidores, donde se encuentra estancado.
Las razones de este parón, según la operadora dominante, hay que buscarlas en la propia regulación que estableció el Gobierno. Ésta no exigía ningún tipo de compromiso de permanencia por parte de los operadores interesados una vez que se había iniciado el proceso. Así, según Telefónica, de los 20 operadores que mostraron interés al inicio de la liberalización el pasado mes de enero, actualmente únicamente continúan adelante doce Al-pi, Alúa, BT Telecomunicaciones, Colt Telecom, Comunitel, Euskaltel, Jazztel, FirstMark, Ono, Ola Internet, Retevisión y Uni2.
Estas bajas, según Telefónica, han ido retrasando el proceso ya que cada vez que se retiraba una de las operadoras alternativas obligaba a recalcular los nuevos precios para todas las demás.
Ante esta situación, Telefónica ha presentado ante la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) y las operadoras alternativas una nueva propuesta de procedimiento que acelere la apertura del bucle local, que según la operadora, podría ser una realidad después de verano.
El nuevo procedimiento diseñado pretende que los operadores puedan hacer una predicción más segura de los costes que supondrá la instalación de sus equipos en las centrales de Telefónica, independientemente del número final de empresas interesadas. Se contempla asimismo una reducción del 20/25 por ciento de los costes de adecuación y una disminución en el coste recurrente del servicio de ubicación (precio/m2 y mes). Además, la propuesta establece que las gestiones de las negociaciones se realicen vía electrónica y no por correo tradicional, además de exigir a los competidores un mayor compromiso en la horquilla de costes del proceso. Según explica Rafael Díez Vega, director general de Servicios para Operadores y Regulación de Telefónica, los operadores alternativos deben tener muy claro a qué núcleos de consumidores se dirigen y qué número de las 10.000 centralitas de Telefónica van a necesitar para ello.
En cualquier caso, la CMT tiene que revisar y transformar aspectos de la normativa que regula la apertura del bucle local el próximo mes de julio, tras recibir los informes de la prueba piloto que Telefónica está realizando en la central local de Delicias, en Madrid, junto a los operadores alternativos y destacados fabricantes de equipos.