Las escuelas – desde educación primaria hasta la universidad- están experimentando nuevos retos en conectividad, desde una mayor dependencia de los recursos basados en Internet para hacer los deberes, la necesidad de apoyar el aprendizaje a distancia, técnicas innovadoras de enseñanza e investigación y un número cada vez mayor de dispositivos conectados.?
Tradicionalmente, las instituciones de enseñanza superior han dado prioridad a la actualización o ampliación de las redes Wi-Fi existentes en los campus para complementar la infraestructura Ethernet fija. Sin embargo, este método no cumple criterios clave como la fiabilidad, la seguridad, el rendimiento, la cobertura, la capacidad y la movilidad.?
“Las instituciones educativas necesitan una infraestructura de comunicaciones evolucionada para aprovechar todas las ventajas de las aplicaciones de banda ancha e IoT”
Las necesidades de conectividad de un campus moderno y ajetreado son complicadas. Una red puede verse sobrecargada por la combinación de dispositivos personales, tecnología escolar y herramientas de colaboración. Por no hablar de la necesidad de sistemas de seguridad del campus, como cámaras de vigilancia y detectores de humo, así como iluminación inteligente y otras infraestructuras críticas del edificio. Las instituciones educativas necesitan una infraestructura de comunicaciones evolucionada para aprovechar todas las ventajas de las aplicaciones de banda ancha e IoT, debido a la creciente densidad de dispositivos y a los requisitos críticos de conectividad. La solución más eficaz y fiable es una red inalámbrica privada.
Nueva era en conectividad
Una red inalámbrica privada ofrece un control total sobre la creación y gestión de múltiples redes locales, con las ventajas añadidas de una baja latencia, una seguridad sólida y la capacidad de escalar según sea necesario.?
En Estados Unidos, el espectro compartido CBRS, que se puso a disposición comercial a través de FCC a principios de 2020, es una excelente opción que permite a las redes LTE privadas complementar las soluciones cableadas y Wi-Fi heredadas que la mayoría de las instituciones ya tienen instaladas. El gobierno ha puesto el espectro CBRS a disposición de las industrias, incluida la educación, proporcionando licencia para operar una red inalámbrica LTE privada. Una red LTE privada puede conectar cientos de dispositivos, máquinas, sensores o usuarios con una sola celda pequeña.?
“La solución más eficaz y fiable es una red inalámbrica privada”
Según una encuesta de Nokia a diferentes empresas, incluidas instituciones educativas, la mayoría de los encuestados afirma que pediría asesoramiento a un operador móvil a la hora de desarrollar su estrategia de despliegue de redes privadas. Creen que un operador móvil les dará acceso a conocimientos y experiencia en el diseño, construcción y explotación de una red móvil, así como acceso a los próximos lanzamientos tecnológicos.?
Estudiantes y profesores necesitan acceso a recursos en línea y aulas virtuales. Un despliegue de red privada a gran escala puede dar servicio a toda una región, permitiendo a miles de estudiantes asistir a la escuela y acceder a servicios y recursos en línea.