España se mantiene como líder europeo y mundial en despliegue y adopción de FTTH. Con una cobertura del 92%, una tasa de absorción del 88%, un 79% de penetración (más de 10 puntos porcentuales por delante de otros países de la UE4) y una cobertura rural del 80% de los hogares (32 puntos porcentuales por encima de la media de la UE).
Esta posición de liderazgo se debe a que -tal y como explica el informe que acaba de presentar, por segundo año consecutivo, Onivia y Nae-,nos encontramos ante un mercado que maximiza las oportunidades del modelo mayorista.
De hecho, la cobertura casi completa de fibra se ha logrado gracias a la oferta de red FTTH por parte de proveedores neutros de infraestructuras y operadores regionales (actualmente la segunda red de fibra más grande de España) y gracias a un ecosistema sofisticado con una malla muy rica y profunda de actores y acuerdos (se han identificado hasta 26 relaciones mayoristas entre actores clave).
El documento ofrece análisis, estadísticas y opiniones sobre la industria de la fibra en España, poniendo de manifiesto que el acceso a la infraestructura de banda ancha es clave para el desarrollo de un país. Sin embargo, persisten las diferencias entre áreas urbanas y rurales.
Índice de temas
Tareas pendientes: cerrar la brecha rural
De acuerdo con el documento, en términos de cobertura la brecha digital persiste a pesar del esfuerzo de los despliegues privados y los programas gubernamentales subsidiados. Como los famosos ÚNICO.
Pese a estos intentos, la cobertura rural se sitúa en el 80% de los hogares, mientras que en las metrópolis se sitúa en el 96%. Sin embargo, hay buenas noticias al respecto y es que se ha identificado una tendencia positiva: hay mayores niveles de cobertura en las zonas con mayor presencia de ISP.
Existen mayores niveles de cobertura en zonas rurales con mayor presencia de ISP
Por otra parte, analizando los datos obtenidos por MedUX también se constata que nos encontramos ante una brecha digital en términos de rendimiento y QoE (satisfacción del usuario). En concreto, el rendimiento en zonas urbanas es mejor en términos de velocidad de descarga (219 frente a 186 Mbps) y latencia media (15 ms frente a 17 ms) que en zonas rurales. El mayor uso de una red Wi-Fi obsoleta en las áreas rurales ayuda en parte a explicar la brecha en estos enclaves. No en vano, la presencia de Wi-Fi 4 casi se duplica en las zonas rurales que en las urbanas (21% vs. 12%)
Mala cobertura, menor velocidad de descarga y redes Wi-Fi obsoletas ponen de manifiesto el gap existente entre zonas rurales y urbanas
En definitiva, todavía queda mucho por hacer ya que se ha detectado un problema en la cobertura y en el rendimiento de la red que debe solventarse de manera conjunta por parte de las instituciones públicas, los reguladores y la propia industria española de banda ancha. Aunque todos estos actores están trabajando para maximizar los beneficios para el país y la sociedad de este liderazgo en los despliegues de FTTH, todavía hay algunas líneas de mejora como cerrar la brecha de rendimiento rural. En este sentido, el nuevo proceso para evaluar la calidad de la conectividad rural por parte del regulador puede ser un paso importante.
Claves para cerrar la brecha digital
En el informe se exponen cuatro claves para cerrar la brecha digital:
Colaboración
Continuar fomentando las asociaciones público-privadas para cerrar la brecha de infraestructura digital entre las zonas rurales y urbanas y seguir evolucionando los acuerdos privados.
Proporcionar un acceso asequible
Asegurar que los servicios sean asequibles para todos, fomentando la participación de todos los actores de la cadena de valor de las telecomunicaciones en las oportunidades rurales. “Debemos encontrar un delicado equilibrio entre la asequibilidad y la rentabilidad a largo plazo”, explican los autores del informe.
Innovación tecnológica
Invertir en nuevas tecnologías para mejorar la cobertura (XGSPON | 5G | conectividad satelital), el rendimiento y la QoE. Mejorar los equipos es fundamental para fomentar la competencia y ofrecer las mejores opciones a los clientes finales.
Sostenibilidad
Y, por supuesto, la sostenibilidad. Optimizando los procesos para para reducir la huella de carbono tanto en el despliegue y el mantenimiento de las redes, así como centrarse en permitir y aprovechar las oportunidades “verdes”.
