La digitalización del mundo rural sigue siendo una asignatura pendiente. Más de 600.000 hogares y empresas en pequeñas localidades de España carecen todavía de acceso a una conexión de calidad. Este desfase se agrava con el cierre progresivo de las antiguas centrales de cobre, dejando sin servicio o con una conexión muy limitada a numerosas zonas que no disponen aún de fibra óptica.
Ante esta situación, Cercedilla acogió unas jornadas sobre Internet de las Cosas (IoT) centradas en la innovación y la seguridad en municipios rurales. El evento se celebró en el Museo del Esquí Paquito Fernández Ochoa y reunió a representantes de entidades locales y expertos tecnológicos para presentar alternativas concretas que mejoren la gestión pública y la conectividad.
El acceso vía satélite y proyectos como el Plan Único Demanda Rural se plantearon como soluciones viables para llevar una conexión estable y segura a cualquier punto del territorio, sin depender de redes cableadas.
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Tecnología al servicio de la gestión municipal
Las jornadas, impulsadas por Bluetel WiFi, se dirigieron principalmente a ayuntamientos, técnicos de infraestructuras, entidades de desarrollo local y empresas con operaciones en zonas remotas. El objetivo fue claro: mostrar cómo la tecnología puede mejorar los servicios y hacer más eficientes los recursos públicos y privados.
Se presentaron casos de éxito y soluciones relacionadas con la digitalización de servicios municipales, la videovigilancia, la realidad aumentada, la prevención de riesgos naturales, la educación a distancia y la automatización en la gestión local. La conectividad también se abordó como un factor clave en sectores estratégicos del mundo rural como la agricultura, la ganadería, la logística y el turismo.
Durante el encuentro se incidió en cómo la conectividad vía satélite permite implementar redes inteligentes en entornos sin fibra, abriendo paso a la integración de sensores, plataformas de gestión remota o sistemas de alerta temprana, incluso en las zonas más apartadas.
Cercedilla como laboratorio de transformación digital
El evento de Cercedilla se enmarca en un contexto más amplio: el proceso de modernización digital que viven los municipios de la Sierra de Madrid. A pesar de los avances, muchos ayuntamientos siguen afrontando importantes limitaciones en su nivel de digitalización.
Para reducir esta brecha, la Comunidad de Madrid colabora con empresas tecnológicas en el desarrollo de iniciativas como RETOMadrID, que busca mejorar las habilidades digitales de la población en 43 municipios de menos de 20.000 habitantes. En paralelo, se están habilitando 120 Puntos de Inclusión Digital (PID) en espacios públicos, dotados con equipos informáticos y formación personalizada para vecinos, especialmente en zonas con población envejecida.
Otras acciones destacadas incluyen la creación de oficinas de asesoramiento en conectividad para municipios pequeños, la mejora de la ciberseguridad en las administraciones locales y el impulso de espacios abiertos de innovación en áreas rurales como la Sierra Norte y la Sierra Oeste, pensados para la formación tecnológica de sus habitantes.
La digitalización del entorno rural se perfila como un elemento esencial para garantizar igualdad de oportunidades en todo el territorio. Las jornadas de Cercedilla mostraron que la tecnología ya está disponible, solo falta acelerar su implementación para que deje de haber una España conectada y otra desconectada.
