La cadena de valor de las 5G edge networks supone una oportunidad para que la industria genere nuevos ingresos y gane visibilidad en un mercado que incluirá compañías de centros de datos, empresas de determinados verticales, proveedores de nube pública y de entrega de contenido (CDN). Todos estos jugadores están invirtiendo significativamente en ubicaciones de borde, infraestructura 5G y redes troncales que los conectan. Así las cosas, según un nuevo informe de Abi Research, las redes de borde 5G desempeñarán un papel clave en el desbloqueo del potencial comercial de nuevos casos de uso, como las redes privadas 5G. De hecho, la consultora estima que se espera que los ingresos de las redes privadas 5G crezcan desde los 1.600 millones de dólares en 2021 a 65.000 millones en 2030, con una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 60,1%
“Con las redes de borde 5G, se cerrarán acuerdos empresariales personalizados. En consecuencia, los CSP y los fabricantes buscan establecer modelos de negocio que se rijan por diferentes KPI, tanto técnicos como comerciales”, explica Don Alusha, analista sénior de 5G Core &Edge Networks en Abi Research. Esto contrasta con los productos que funcionan con los modelos comerciales de suscriptores particulares del mercado masivo, específicos de cada país o región. Los despliegues de este tipo de infraestructuras marcarán la evolución del negocio y la integración con las industrias verticales. Con ese fin, los operadores de nivel 1 (por ejemplo, AT&T, Telefónica, Verizon y Vodafone) y los proveedores (por ejemplo, Ericsson y Nokia) están configurando nuevas unidades de negocio empresariales.
Además, grandes operadores hiperescala como Amazon, Google y Microsoft están adoptando un enfoque estratégico con nuevas soluciones destinadas a desbloquear el valor de 5G y las redes de borde. “Los CSP poseen una infraestructura perimetral que tiene potencial en términos de computación local y conectividad de baja latencia, pero tienen una experiencia limitada en la nube. Los proveedores de nube son ágiles e innovadores. Con los acuerdos de colaboración adecuados, no hay ninguna razón por la que el edge computing 5G no pueda generar valor para todas las partes involucradas. Sin embargo, en la actualidad nadie puede predecir adónde va a ir esto”, señala el directivo.
Sin embargo, estas redes tendrán que hacer frente a barreras que podrían afectar a la madurez del mercado. Los casos de negocio siguen siendo un área clave en la que se requiere más trabajo de la industria en general. Los modelos para aplicaciones avanzadas dependerán del apetito del mercado por estas infraestructuras y el deseo de las empresas de modernizar sus operaciones. Además, el ecosistema tecnológico para el edge computing está sujeto a una madurez continua. Llevará tiempo rediseñar el hardware y el software existentes para ubicaciones de borde altamente distribuidas, con espacio y recursos limitados.
“Un buen punto de partida para impulsar la madurez del ecosistema es que la industria reconozca que la construcción de una red de borde 5G es el primer paso. El segundo paso es averiguar cómo integrar mejor estas nuevas tecnologías en los procesos de negocio de las empresas. Puede que no sea una cuestión de tecnología, sino una cuestión del grado de esfuerzo necesario para iniciar la convergencia del servicio y un cambio de proceso que abarque el marketing, las ventas, el diseño de productos, etc. Esto sigue siendo tema de discusión en la industria”, concluye Alusha.