Durante la pandemia de Covid-19 diferentes países han puesto en marcha sistemas de seguimiento o rastreo de contactos para identificar a las personas infectadas. En anteriores crisis sanitarias esta tarea se llevaba a cabo mediante entrevistas con pacientes, pero en el contexto actual, en el que la movilidad global es una regla esencial, se ha recurrido a medios digitales.
La ETSI, a través de su grupo Europa para la protección pandémica preservadora de la privacidad (E4P), acaba de publicar el informe Comparación de los sistemas de rastreo de contactos pandémicos existentes en el que, como su nombre indica, se comparan los mecanismos de rastreo de contactos Covid-19 puestos en marcha en todo el mundo.
El documento incluye la caracterización de una serie representativa de aplicaciones, entre las disponibles actualmente, que van desde los Estados Unidos a Japón, así como una lista de los métodos de rastreo de contactos digitales existentes más relevantes. El estudio también ofrece un análisis comparativo de estas soluciones y, finalmente, describe una serie de desafíos que aún no se han abordado como primer paso hacia una futura interoperabilidad.
“Nuestro trabajo actual trata de ofrecer mejores soluciones globales de rastreo de contactos para pandemias en el futuro. Desafortunadamente, esta pandemia no es la primera y no será la última por la que pasará el mundo. Como muchos de nosotros viajamos de un país a otro muy a menudo por negocios y placer, las aplicaciones interoperables representan una de las medidas de mitigación que pueden servir a todos los ciudadanos”, comenta Miguel García-Menéndez, vicepresidente del Grupo de Especificación de la Industria ETSI E4P. “Ya identificamos una serie de desafíos en nuestro informe y comparamos una serie de tecnologías y protocolos diferentes. Aún queda mucho por hacer”, sentencia.
Los próximos pasos de ETSI E4P ISG se centrarán en finalizar la definición de los requisitos generales de este tipo de soluciones; realizar un análisis de los mecanismos relacionados con los dispositivos (esencialmente teléfonos inteligentes) utilizados; especificar los requisitos de los sistemas back-end involucrados; y, finalmente, la configuración de un marco de referencia para la interoperabilidad de los diferentes métodos de rastreo digital existentes. Más adelante se evaluarán cómo mejorar los sistemas y se explorarán y desarrollarán nuevos.