Orange ha anunciado hoy su plan de despliegue en España de una nueva red de fibra óptica hasta el hogar (FTTH). La firma invertirá unos 300 millones de euros en los próximos cuatro años para llegar a 1,5 millones de hogares y negocios ubicados en las principales ciudades del país. Madrid y Barcelona están las primeras en la lista. Les seguirán otras que no se han hecho públicas aún. A finales de 2012, ya habrá domicilios que cuenten con esta tecnología.
La nueva red permitirá que los clientes se beneficien de conexiones simétricas de muy alta velocidad (100 Mbps y superiores) que posibilitarán el acceso a distintos servicios: TV en HD, cloud computing, domótica, telepresencia, juegos online, etcétera. La calidad de la navegación se verá incrementada y soportará la conexión de múltiples dispositivos.
La compañía ha confirmado que ha invitado a otros operadores a participar en este proyecto. El objetivo es llegar a compartir las redes verticales ubicadas en los edificios y que son las que llegan a cada hogar. Por ello, Orange mantiene abiertas las negociaciones con Telefónica -propietaria de la mayoriá de estas redes- para que ambas empresas puedan operar con ellas. De momento, Orange y Telefónica han alcanzado un acuerdo en la parte técnica. Sin embargo, en la parte económica todavía quedan algunos flecos. Desde Orange, Samuel Muñoz, director de la unidad de Negocio Fijo, ha aclarado que son optimistas al respecto y que están convencidos de que el trato se cerrará de manera satisfactoria.
Hay otros aspectos clave que también tienen que cerrarse para que el proyecto de la multinacional francesa salga adelante. Las limitaciones actuales por el uso que se hace de los ductos por los que corren los cables o la necesidad de seguimiento de la implantación operativa por parte de la CMT (Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones), hacen necesaria la colaboración de distintos actores que desde Orange no han puesto en duda. Asimismo, se torna indispensable que la Administración Pública dé el paso definitivo para que los trámites se aceleren a la hora de obtener los permisos requeridos.
El acto de presentación del proyecto, que ha tenido lugar en el centro de Madrid, ha contado con la intervención de Jean Marc Vignolles, CEO de Orange, que ha señalado que el futuro de las telcos “pasa por la fibra óptica”. Vignolles, conocedor de la mala situación económica que atraviesa España, ha dejado claro que Orange “tiene una firme voluntad inversora” en nuestro país. Ha añadido que espera contar con la colaboración de “otras operadoras, de la CMT y de la Administración Pública”. El consejero delegado de Orange ha concluido su discurso recordando que es vital “que entre todos den difusión a estas tecnologías y extiendan el conocimiento de las mismas. El éxito del proyecto requiere de un marco regulatorio específico, en el que nos faltan algunos puntos. Nuestro sector puede contribuir de forma decisiva a la salida de la crisis, creando empleo y mejorando la productividad en las empresas y las administraciones”.
