La entrada en vigor de la nueva Ley de Firma Electrónica permitirá a los propios notarios actuar como Autoridad de Registro con acceso a un registro público de todos los certificados emitidos.
Como no podía ser de otro modo, las actividades desarrolladas por el Colegio de Notarios en el entorno digital están dotadas de las máximas medidas de seguridad. Así, la firma electrónica notarial está basada en la tecnología PKI, de manera que los certificados digitales de los notarios cumplen con el estándar internacional X.509 v.3 de ITU-T, entregándose en forma de tarjeta inteligente criptográfica protegida por un PIN alfanumérico.
Para el ministro de Justicia, José María Michavila, esta iniciativa ofrece altos niveles de seguridad, necesarios para conseguir afianzar la confianza de los ciudadanos en los sistemas electrónicos. Su trabajo es ofrecer la seguridad jurídica preventiva que garantice el buen funcionamiento de los sistemas electrónicos.