La fibra óptica ha ido poco a poco abriéndose hueco en el mercado español. Cuando hablamos de esta tecnología, la primera compañía que le viene a la cabeza a cualquier internauta es ONO. Sus campañas publicitarias relativas a su oferta de fibra óptica han inundado la televisión o los periódicos. Desde su fundación, en 1998, ONO ha conseguido llevar su propia red basada en la tecnología HFC (híbrido fibra óptica/coaxial) a más de siete millones de hogares españoles. La inversión realizada ha superado los 9.000 millones de euros. Según fuentes consultadas en ONO, ya hay “más de medio millón de clientes que disfrutan de altas velocidades de navegación en Internet, como son los 50 o los 100 megas”.
Pero HFC no es lo mismo que FTTH. Cuando hablamos de FTTH nos referimos a lo que se conoce por sus siglas en inglés como Fiber To The Home, o lo que es lo mismo, fibra hasta el hogar. La expresión hace referencia al proceso de llevar los cables de fibra óptica hasta cada uno de los domicilios, lo que se conoce como la “última milla”. La tecnología FTTH sólo usa conductos diseñados para la fibra óptica, sin cables coaxiales. Movistar sí que lleva tiempo ofreciendo servicios de FTTH, concretamente desde 2007.
Pablo Ledesma, director de fibra óptica y nuevas soluciones en Telefónica, explica que comenzaron a construir esas infraestructuras “con varios pilotos localizados en núcleos de población concretos, orientados a encontrar las mejores opciones de equipamiento e instalación”. Cinco años después, Telefónica ha anunciado un ambicioso proyecto para extender esta red de fibra óptica a todo el territorio nacional. El anuncio fue publicado en mayo por REDES TELECOM.
Orange también ha presentado un proyecto similar publicado a mediados de junio en este medio. Alcatel –Lucent es otra de las compañías que participan en el desarrollo de la tecnología FTTH en España. Javier Zapater, responsable de soluciones de acceso fijo en la firma, señala que en nuestro país ha “iniciativas muy interesantes de despliegue de redes FTTH neutras promovidas por autoridades locales, en la que el operador pone a disposición de otros proveedores de servicios una red de FTTH con la que ofrecer servicios de banda ancha. Una fórmula que tiene como ejemplo más representativo la extensión de la red en Asturias, en la que Alcatel-Lucent ha proporcionado la solución tecnológica y el proyecto llave en mano”. Por tanto, podemos decir que estamos en un momento absolutamente decisivo para la tecnología FTTH en España.
Prestaciones de las redes FTTH
¿Qué podemos esperar de la fibra óptica hasta el hogar? Para Javier Zapater, la clave está en que los usuarios finales buscan “inmediatez, es decir, más y más ancho de banda y bajísima latencia. Los servicios de vídeo son cada vez más exigentes en cuanto al uso del ancho de banda”. Zapater aclara que la fibra óptica, por sí misma, “no tiene las limitaciones de velocidad inherentes a los pares de cobre que existen en la actualidad. Los equipos de FTTH explotan de forma eficiente la capacidad que ofrece la fibra óptica proporcionando esos anchos de banda grandes que demandan los usuarios”.
En ONO, hacen referencia al mundo “digital y conectado” en el que su red HFC ayuda a sacar el máximo partido a una conexión a Internet: “con 100 megas un hogar puede mantener distintos dispositivos conectados al mismo tiempo sin perder calidad en ninguno de ellos. Podemos jugar a la videoconsola online, ver una película en streaming en HD, tener varios ordenadores intercambiando archivos y realizar videollamadas, así como servicios en la nube”.
Pablo Ledesma, integrante de Telefónica, apunta que Movistar Fibra Óptica 100 Mb permite descargar archivos “hasta 10 veces más rápido, como mínimo, en relación al ADSL de siempre”. Ledesma también hace referencia a la posibilidad de conectar varios equipos sin que la capacidad de la red se vea mermada. El director de fibra óptica y nuevas soluciones en Movistar añade que “el medio de transmisión (la FO) permite esto en la actualidad, pero en un futuro alcanzará velocidades de hasta 1 Gb simétricos (ya probado en laboratorio), por lo que es una tecnología que puede durar muchas décadas”.
El responsable de soluciones de acceso fijo de Alcatel-Lucent, Javier Zapater, añade que la tecnología FTTH no sólo beneficia a los usuarios con una conexión de fibra óptica, también aquellos que usan el móvil. “Los operadores también son globales y ofrecen servicios tanto a sus clientes con conexión fija, como a sus clientes móviles. Para poder dar más ancho de banda a estos últimos se necesita más capilaridad en la distribución de estaciones base que por su evolución tecnológica son cada vez más pequeñas y eficientes”. Zapater cree que los despliegues de fibra para FTTH “permitirían a los operadores proporcionar conectividad a esas estaciones base dotándolas del ancho de banda inherente a las redes FTTH”.
¿Y el precio? ¿Hay una gran diferencia entre FTTH y otras tecnologías como el ADSL? Para Javier Zapater, los precios de los servicios “dependen de muchos factores pero sobre todo del valor apreciado por el usuarios”. Zapater recalca que el valor que proporciona la tecnología FTTH es “muy alto”, ya que dota a la red de “muchísima capacidad y capilaridad”. Sin embargo, admite que “el entorno competitivo y las condiciones económicas del país condicionarán de forma inevitable la política de precios del mercado”. La opinión de ONO se mantiene en la misma línea, la que aclara que la diferencia de precio “no es tanta si atendemos a la calidad que ofrecen las redes de fibra frente al ADSL”. La compañía sostiene que las redes basadas en el par de cobre no están a la altura de la “calidad y la solidez” de las redes HFC con las que trabaja ONO.
Pablo Ledesma hace referencia a la “gran diferencia” que hay entre la inversión necesaria para dotar de FTTH a un cliente u optar por el ADSL. Ledesma revela que “además de la instalación personalizada en el hogar que Movistar hace gratis, la compañía apuesta por llevar a sus clientes la mejor tecnología posible a un precio competitivo”. Ese precio competitivo se sitúa en torno a los 40 euros. Para ser más concretos, “Movistar Fibra Óptica 50 Mbps se ha posicionado en 39,90 euros al mes, que es el precio que ha tenido el ADSL muchos años”, defiende Ledesma. El precio comprende, además de la conectividad y la instalación, un disco duro virtual de 100 Gb para almacenar contenidos en red, llamadas a fijos nacionales, llamadas de fijos a móviles, antivirus y Aula 36. Si el cliente tiene contrato de voz móvil con Movistar, se ofrecen más prestaciones por el mismo precio, por ejemplo, aumentando la velocidad hasta los 100 Mbps.
Proyectos de fibra óptica
Todas las compañías implicadas están dando pasos para no quedarse atrás y ganarse la confianza de los usuarios. Javier Zapater declara que Alcatel-Lucent, como “suministrador global de soluciones”, tiene un “completísimo catálogo de equipos y de servicios para el despliegue de fibra, así como soluciones extremo a extremo que incluyen aplicaciones de alto valor que ayudan a los clientes y operadores a generar más ingresos reduciendo sus costes de explotación”.
En ONO, se están ocupando de mantener el foco en potenciar las altas velocidades sobre Internet con servicios de 30, 50 y 100 megas reales para los clientes residenciales. Para las pymes lanzan en el mercado nacional ofertas que llegan a los 200 megas reales para “potenciar la competitividad de las empresas”. Pero sin duda alguna, las dos novedades más importantes que hemos conocido recientemente han sido los planes que Telefónica y Orange han puesto en marcha para que la tecnología FTTH llegue a los hogares y negocios de toda España.
El pasado 16 de mayo, Telefónica convocaba a los medios en el nuevo Espacio Fundación Telefónica de la Gran Vía madrileña para anunciar su plan de despliegue de fibra óptica en la capital y en el resto de España. La multinacional y el Ayuntamiento de Madrid tienen previsto llevar la tecnología de conectividad más avanzada a 1,3 millones de hogares y empresas antes de que acabe el año. De hecho, la operadora ya tiene cubiertos con fibra casi el 100% de los distritos de Moncloa-Aravaca, Hortaleza o Arganzuela. A finales de 2012, las previsiones apuntan a que más del 80% de los domicilios y sedes empresariales de Madrid estarán conectados. La velocidad alcanzará los 100 megas.
Pablo Ledesma añade que el plan se hará extensivo bajo los mismos plazos y condiciones a Barcelona. Canarias, Valencia, Bilbao o Extremadura son las siguientes regiones que hay en la hoja de ruta de Telefónica. Luis Miguel Gilpérez, presidente de Telefónica España, declaró el día de la presentación que este proyecto “marcará un antes y un después” y que el papel de las operadoras “es indispensable para mejorar la situación económica en España”. La inversión de Telefónica para que los plazos se cumplan llegará a los 200 millones de euros solo en Madrid. En cuanto al conjunto del país, el gasto oscilará entre los 400 y los 500 millones, ya que la compañía se ha propuesto que a finales de 2012 haya 3 millones de hogares y empresas españolas con fibra óptica.
Según cifras de Telefónica, la puesta en marcha del proyecto puede generar 2.200 empleos directos. Asimismo, habrá 200 tiendas y dos call center a disposición de los clientes para que puedan resolver sus dudas. La nueva red de fibra óptica está llamada a potenciar el tejido empresarial español, modernizar la forma de trabajar, facilitar la labor a los autónomos y pymes, y prestar mejor servicios a los ciudadanos.
Un mes más tarde, el 15 junio, le tocó el turno a la francesa Orange. La compañía confirmaba que va a extender una nueva red de fibra hasta el hogar en la que invertirá 300 millones de euros en los próximos cuatro años para llegar a 1,5 millones de hogares y negocios de las principales ciudades. Madrid y Barcelona, al igual que ocurre con Telefónica, están las primeras en la lista. Les seguirán otras que en el caso de Orange no se han hecho públicas aún. A finales de 2012, ya habrá usuarios que puedan acceder a esta tecnología gracias al soporte de Orange.
La red que propone la firma permitirá que los clientes se beneficien de conexiones simétricas de gran velocidad (100 Mbps y superiores) que posibilitará el acceso a múltiples contenidos: TV en HD, cloud computing, domótica, telepresencia, juegos online, etcétera. Más calidad de navegación y soporte para múltiples dispositivos. Orange confirmó que había invitado a otros operadores –en clara referencia a Telefónica- a participar en el proyecto. El objetivo es compartir los cables verticales ubicados en los edificios y que son las que llegan a cada domicilio. Por ello, Orange mantiene abiertas las negociaciones con Telefónica para que ambas empresas puedan operar con ellas. El motivo es claro: Telefónica es la dueña de la mayoría de esos verticales fruto del régimen con carácter de monopolio que la multinacional española mantuvo hasta hace relativamente poco.De momento, Telefónica y Orange han alcanzado un acuerdo en la parte técnica. Sin embargo, en la parte económica todavía quedan algunos flecos para estampar la firma definitiva. Samuel Sánchez, director de la unidad de Negocio Fijo de Orange, aclaró ante los medios que son optimistas respecto al rumbo de esas negociaciones y que están convencidos de que se llegará a un acuerdo satisfactorio para todas las partes.
El papel de todos es fundamental
¿Están las infraestructuras españolas preparadas para soportar el avance de la tecnología FTTH? En el acto de presentación del proyecto de Orange, Jean Marc Vignolles, CEO de la compañía, señaló que el fututo de las empresas de telecomunicaciones “pasa por la fibra óptica”. Vignolles, conocedor de la mala situación económica que atraviesa España, dejó claro que Orange “tiene una firme voluntad inversora en nuestro país”. Dejó claro que esperan contar con la colaboración de “otras operadoras, de la CMT y de la Administración Pública”. El consejero delegado de Orange concluyó su intervención recordando que es vital “difundir entre todos estas tecnologías y extender el conocimiento de las mismas. El éxito del proyecto requiere de un marco regulatorio específico en el que nos faltan algunos puntos. Nuestro sector puede contribuir de manera decisiva a la salida de la crisis, creando empleo y mejorando la productividad en las empresas y administraciones”.
Y es que a la negociación con Telefónica hay que sumar otros aspectos claves que Orange quiere cerrar para que el proyecto salga adelante con todas las garantías. Las limitaciones actuales por el uso que se hace de los ductos por los que corren los cables o la necesidad de seguimiento de la implantación operativa por parte de la CMT (Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones), hacen necesaria la colaboración de distintos actores que desde Orange no ponen en duda. No menos importante es el empuje de la Administración Pública a la hora de acelerar los trámites para obtener los permisos necesarios.
Javier Zapater, de Alcatel-Lucent, se muestra totalmente confiado desde su posición y cree que la regulación española actual, que “permite la reutilización de los conductos existentes para el despliegue de fibra así como de la infraestructura”, ayuda a que distintos operadores hagan sus propios planes de despliegue de FTTH. En ONO se muestran confiados en el poder de su “servicio único y exclusivo en España”, que recordamos da servicio a más de siete millones de hogares. Por ello, se muestran confiados en que la demanda de estos servicios “va a continuar en esta línea”. Por último, Pablo Ledesma defiende que “para acometer el desafío de la tecnología FTTH en España, es necesario invertir y desplegar una nueva red, justo lo que está haciendo Telefónica”.
La situación parece la idónea para que de una vez por todas la fibra óptica llegue hasta los hogares. Los nuevos proyectos de Orange y Telefónica, sumados a la experiencia de de firmas como Ono y la colaboración de otras como Alcatel-Lucent, despejan el camino para una tecnología que lleva tiempo reclamando más protagonismo.