El auge de Internet obliga a buscar nuevas formulas para la correcta transmisión de datos. Por ese motivo la Red se está convirtiendo en el elemento impulsor de una importante demanda de ancho de banda por parte del mercado. Se trata de un movimiento generalizado en el que la industria del satélite está plenamente inmersa.
Básicamente podemos afirmar que existen dos tipos principales de sistemas de satélite. El primero se refiere a los que se encuentran en la órbita terrestre geoestacionaria (GEO, Geosynchronous Earth Orbit Satellite), que son aquellos situados a 35.869 kilómetros de la Tierra. En segundo lugar nos encontramos con los satélites no geoestacionarios (NGEO) ubicados en las órbitas terrestres baja (LEO) y media (MEO). Claro que no podemos olvidarnos de los sistemas ópticos y de gran altitud.
Según José Andrés Rojano, consultor especialista en informática y telecomunicaciones, probablemente el satélite sea la alternativa real a la congestión que se producirá, en los canales actuales (Módem, RDSI, ADSL), según aumente el número de usuarios de Internet. Pero no es esta su única ventaja porque, además, es ideal para aplicaciones multimedia en las cuales el flujo de datos es muy importante..
Astra ya dispone de una amplia oferta de servicios multimedia en banda ancha Ofrece una tarifa plana por un precio mensual de poco más de 100 euros (16.600 pesetas). Para conseguir este acceso hay un equipamiento técnico mínimo necesario antena parabólica orientada al satélite y tarjeta interna en el PC o un módulo externo. La ventaja del sistema es que los datos entran directamente desde la antena parabólica al PC sin necesidad de pasar por la red telefónica.
El sistema de satélite Astra es el de mayor penetración en Europa, y aunque ha estado centrado en la distribución de canales de televisión ahora ha decidido entrar de lleno en el mercado de acceso a Internet, tanto para empresas como para usuarios residenciales.
El comercio electrónico también hace su aparición en estos sistemas. Así, la oferta de Astra incluye la modalidad llamada servicios multimedia, que permite al usuario acceder a un menú de contenidos tales como videos, música en formato MP3, software y demostraciones de vídeojuegos, entre otros. El cliente solicita el producto que le interese y lo recibe en su ordenador, por supuesto vía satélite, en el plazo de 24 horas
Como hemos visto algunos sistemas de transmisión por satélite para acceder a Internet tienen todavía sus limitaciones, porque en muchas ocasiones, necesitan el apoyo de otros sistemas de transmisión como el teléfono. En la actualidad ya se está trabajando para conseguir el acceso universal a través de estos sistemas de transmisión sin tener que apoyarse en otros medios.
Sin embargo, a pesar de las posibilidades que ofrece el satélite para acceder a Internet, este sistema todavía no es muy utilizado. Quizá esto se deba en parte al desconocimiento de sus posibilidades de las ventajas que puede aportar a particulares, empresas y organizaciones de todo tipo al Internet No obstante en la actualidad se usan masivamente para la telefonía móvil.
En Estados Unidos ya está disponible desde hace algún tiempo el acceso a Internet de alta velocidad por satélite. Hasta hace poco la conexión solo valía para recibir información, pero ahora se puede utilizar tanto para bajar como para enviar datos.
El desarrollo de este tipo de conexiones inalámbricas se considera fundamental para el impulso de Internet de alta velocidad, sobre todo en zonas rurales donde difícilmente va a llegar la fibra óptica o el ADSL.
Los proveedores de acceso a Internet a través del satélite tienen un camino despejado lleno de magníficas expectativas, con un amplio mercado potencial en todas esas zonas alejadas e inaccesible al resto de los sistemas de transmisión.
Este acceso a Internet se puede hacer de forma individualizado o integrado en un paquete en el que se oferten, además, diferentes canales de televisión.
La empresa estadounidense Satarband ya ofrece un servicio de acceso a Internet con velocidades aceptables. La empresa se compromete a ofrecer al abonado hasta 500 Kbps, diez veces más que un modem de 56 K, y algo más lento que el cable y el ADSL, que emplea el hilo telefónico normal. La ventaja del satélite es que no necesita abrir zanjas como el cable pero, en cambio, precisa de una antena parabólica y un módem, lo que hace que su precio resulte elevado para zonas urbanas pero bastante interesante para zonas rurales sin otras posibilidades de conexión.
Con el satélite se consigue una cobertura de casi el cien por cien de la población y un 95 por ciento de cobertura del territorio. Ésta es la base del ambicioso proyecto de la empresa Teledesic que tiene la intención de cubrir el cielo de satélites de comunicaciones, especialmente desarrollados para dar acceso a Internet. Este plan tiene el aval y apoyo económico de personas como el dueño de Microsoft, Bill Gates, y de empresas de la importancia de Motorola o Boeing.
Las previsiones iniciales sitúan en 228 el número de satélites que se van a poner a disposición de la empresa para dar acceso a Internet. Son satélites de llamada órbita baja que estarán distribuidos en 12 planos diferentes.
Además, los satélites funcionaran con la idea inicial con la que fue creada Internet, de tal forma que estarán intercomunicados. Esto permitirá que sí un satélite se satura en un momento determinado, parte de su trabajo lo podrá desarrollar otro que esté infrautilizado o que en esos momentos no transmita ni reciba datos.