Con este lanzamiento, la operadora gallega entra en el mercado de operadores móviles virtuales, si bien dispondrá de una red propia integrada basada en la tecnología ‘Soft Switch’, que le permita prestar, de manera conjunta, servicios de voz, datos y vídeo, siguiendo el estándar IMS (IP Multimedia Subsystem). Para el despliegue de su red la compañía ha invertido más de 520 millones de euros.
A través de su propio equipamiento de red, R tendrá a su disposición todas las plataformas necesarias para definir su propio catálogo de productos y servicios de voz, datos y servicios multimedia para sus clientes. Además, la infraestructura de red es compatible con los estándares de segunda y tercera generación (2G y 3G) y estará preparada para la evolución hacia 4G.
Por su parte, el grupo sueco suministrará elementos de la red móvil como plataformas de conmutación IP para móvil, sistemas de base de datos de usuarios y autenticación, infraestructura de portabilidad de número, conmutación de datos en movilidad y plataformas de servicio de mensajes de texto (SMS), mensajería multimedia (MMS) y acceso a Internet WAP.
A día de hoy R cuenta con más de 205.000 clientes, entre particulares y empresas, y puede dar servicios a unos 593.000 hogares y locales empresariales. De acuerdo con la operadora el servicio irá destinado, de manera prioritaria, a sus clientes actuales.
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