En Redes&Telecom hemos tenido la oportunidad de charlar con Enrique Sánchez, recientemente nombrado country business leader de Alcatel-Lucent Enterprise para la región de Iberia (España, Portugal, Angola, Mozambique y Cabo Verde), quien nos detalla cómo la pandemia ha impactado en su negocio, y de manera especialmente favorable en los campos de comunicaciones y comunicaciones unificadas. Pero también nos detalla de qué manera afrontará el futuro más inmediato.
Se acaba de estrenar como country manager de Alcatel-Lucent Enterprise en Iberia. ¿Qué metas y objetivos se ha fijado a corto-medio plazo para la compañía?
Mi incorporación es derivada de la nueva estrategia de la compañía, que ha fijado 30 países objetivo, y España es uno de ellos. De hecho, la figura del country business leader como tal no la había hasta ahora. Pero la relevancia del mercado español es muy alta para Alcatel-Lucent, como parte de la región del Sur de Europa, y no había una persona liderando el negocio como sí la hubo hace unos años. Por tanto, la compañía ha querido recuperar esa presencia institucional. La meta principal es esa apuesta por España, hacerlo un país estratégico, con una inversión importante.
Establezcamos un punto de partida. ¿Cómo se ha encontrado el mercado tras un 2020 tan revuelto?
Hoy estamos viviendo la época post pandemia, y las compañías se encuentran en un momento en el que están teniendo que competir y convivir con esta situación tan única. En cualquiera de los verticales que estamos abordando, como ayuntamientos, hospitales o universidades, por ejemplo, estamos detectando nuevos patrones de consumo. Pero nosotros estamos en un mercado como el del sector de IT que ha superado con nota estos meses, y ha sido clave para navegar y capear la tormenta. Muchas empresas han tenido que utilizar las TIC para cumplir con sus objetivos de mantenimiento de negocio. Estamos ahora mismo todos mirando hacia el futuro, y buscando los campos de oportunidades, que también los hay.
¿Dónde están esas oportunidades para Alcatel-Lucent Enterprise?
Tenemos un portfolio que ha evolucionado, aunque estaba ya antes de la pandemia pero que se ha visto acelerado por el paso al teletrabajo, y también a la necesidad de implementar herramientas de comunicaciones unificadas. En esa línea, veo muchas oportunidades para nuestra herramienta Rainbow, porque todo el mundo tiene que dar respuesta a situaciones que han venido para quedarse. Ahora todas las compañías son conscientes de que deben estar preparadas ante contingencias de estas o similares características.
Igualmente, hace un año los proyectos de migración hacia la cloud no eran tan claros. Había más dudas y desconfianza, pero la Covid-19 los ha acelerado. De hecho, los tiempos se han acortado. Si hace un año hablábamos que, de cara a 2028, el 80% de la infraestructura de TI estaría en la nube, ahora las consultoras apuntan a que será mucho antes, en 2025. En Alcatel lo sabemos y por eso se ha reforzado todo el roadmap para apoyar y acompañar ese proceso.
“La meta principal es esa apuesta por España, hacerlo un país estratégico, con una inversión importante”
¿Podemos decir entonces que 2020 ha sido un año favorable para la compañía? ¿Qué cambios ha traído consigo la pandemia?
España, comparado con otros países europeos cercanos, como Francia, Alemania o Reino Unido, la adopción de la cloud ha sido mayor frente a otros países, que van con más retraso. El año pasado, al tener más experiencia con la nube, nos ha ayudado a estar más preparados. Por lo tanto, los resultados en España han sido muy buenos, hemos crecido cerca del 80% en la práctica totalidad de nuestro negocio, como por ejemplo en las plataformas cloud. Es verdad que ha habido áreas, como por ejemplo el despliegue de infraestructuras hardware, que por momentos no se han podido desplegar precisamente por los meses más duros del confinamiento, pero el negocio en España ha sido muy positivo y uno de los mejores para la compañía.
¿Cree que las comunicaciones fijas han muerto? ¿Qué papel está jugando la nube?
La nube ha venido para quedarse. Pero si la pregunta es si las comunicaciones tradicionales van a desaparecer, la respuesta es no. De hecho, tenemos a día de hoy más de 240 partners activos al año vendiendo centralitas al uso. Por supuesto modernizadas, incluyendo por ejemplo comunicaciones unificadas como un extra. El mercado está cambiando, pero nuestro objetivo es y será siempre el de proteger la base instalada. Sí que estamos viendo simplemente que está creciendo la cloud, pero nuestro negocio de comunicaciones tradicionales sigue funcionando y creciendo. Somos muy respetuosos con nuestros canales y clientes, y en ese sentido queremos ofrecer todas las distintas posibilidades existentes, bien on-premise, bien en la nube. Lo único que cambia es la manera en la que entregamos los servicios.
El cloud conlleva una evolución lógica de nuestras plataformas. Es el caso por ejemplo de la asociación estratégica con RingCentral, que combina lo más reciente en tecnología de comunicaciones unificadas como servicio (UCaaS) de RingCentral, con soluciones y servicios de red, comunicación y en la nube de Alcatel-Lucent Enterprise.
“Creo que lo mejor está por llegar”
En 2018, vuestro consejero delegado, Jean-Clovis Pichon, aseguraba que Rainbow no estaba despuntando porque aún los clientes no terminaban de incorporar las comunicaciones unificadas a sus compañías y sobre todo de integrarlas a sus aplicaciones de negocio. Tres años después y con pandemia de por medio, ¿en qué medida ha cambiado la fotografía?
Por supuesto que ha cambiado. Las comunicaciones unificadas han sido una de las grandes demandas de este año. Nuestra plataforma ya estaba preparada y llevábamos tiempo trabajando en ella. ¿Qué ha pasado con las comunicaciones unificadas? Por supuesto, hay una gran demanda de este tipo de herramientas, pero no todo mundo es capaz de dar una solución como la nuestra, que es para todo tipo de sabores, lo que quiere decir que hemos sido capaces de llevar la infraestructura que ya estaba instalada al siguiente nivel sin tener que reemplazarla, protegiendo así las inversiones de nuestros clientes y partners. Esa ha sido la clave importante del éxito de Rainbow. Estamos hablando de una plataforma abierta, con APIs integradas en los procesos de negocio. Además, es fácilmente gestionable y escalable. Y por tanto su implementación ha sido muy natural. Por citar un ejemplo, el Servicio Cántabro de Salud lo ha implantado para más de 6.000 médicos que ofrecen servicios de teleconsulta.
En el campo de las infraestructuras de Red, ¿qué está haciendo su compañía?
Es, sin duda, una de las partes más desconocidas de Alcatel-Lucent, porque el mercado tiene muy claro que somos líderes en comunicaciones y en comunicaciones unificadas, pero también contamos con un potente portfolio de infraestructura de red, conmutación, WLAN, Wi-Fi… que no siempre es tan conocida, y que, sin embargo, es muy relevante. En ese sentido, cabe destacar que nuestra compañía está muy comprometida con los mercados verticales, y eso es una gran ventaja, porque muchas compañías fabrican productos y soluciones, pero al final lo importante es intentar ajustarse a las necesidades reales de los clientes. Fundamentalmente, los segmentos más estratégicos para nosotros son Administración Pública, salud, hostelería, y transportes. Queremos darles herramientas para poder competir en un mundo cada vez más digital. Nuestra estrategia consiste en seguir desarrollando esa capacidad de entregar la red como un servicio de manera totalmente abierta y teniendo en cuenta a los sectores verticales.
“Nuestra compañía está muy comprometida con los mercados verticales”
Tras una activa y necesaria inversión en tecnología durante la pandemia para asegurar la continuidad de negocio, ¿Teme al 2021? ¿Cómo va a afrontar su compañía estos retos?
Creo que lo mejor está por llegar. De hecho, las previsiones de crecimiento que tenemos de cara a 2021 son de doble digito para nuestra región de Iberia, impulsada gracias también a la estrategia de canal que tenemos. Es verdad que muchas compañías han tenido una necesidad urgente de responder y dar soluciones a sus empleados y clientes, pero las inversiones continuarán. La Administración Pública también tiene pendiente la Agenda 2025 y está haciendo una apuesta decidida por la tecnología. Igualmente, y también en el sector privado hay muchos planes de inversiones que no solamente son a un año. Soy muy positivo al respecto.