La CNMC ha analizado los pliegos previstos para la contratación centralizada de los servicios de telecomunicaciones en la AGE. El valor estimado total de este contrato asciende a 504,6 millones de euros y es la tercera vez que se tramita de forma centralizada (tras los procesos lanzados en 2014 y 2018).
Sobre estos pliegos, la entidad considera una prioridad estratégica fomentar una contratación pública más eficiente y respetuosa con los principios de libre competencia. En este sentido, el sector de las telecomunicaciones ocupa un lugar clave en la contratación pública debido al alto nivel de gasto que representa y a su tendencia a la concentración.
La CNMC comparte iniciativas como la agregación de la demanda en contratos centralizados, ya que pueden contribuir a un uso más eficiente de los recursos públicos.
Recomendaciones de la CNMC
Sin embargo, tras el análisis de los borradores de estos pliegos, la CNMC propone las siguientes recomendaciones:
- Lotes. Desagregar aún más los cuatro lotes actuales para permitir que participen más operadores y evitar una posible falta o escasez de oferentes.
- Análisis previo de mercado. Realizar un diagnóstico detallado sobre la oferta y las necesidades de los servicios para garantizar una correcta planificación y toma de decisiones.
- Presupuesto de licitación y valor estimado. Justificar los presupuestos y criterios de forma más detallada.
- Plazos. Ampliar a dos meses el plazo de presentación de ofertas debido a la complejidad del contrato y ajustar los periodos de implantación según cada lote (entre 9 y 12 meses).
- Garantías. Reevaluar las exigencias de solvencia y las reservas sin cargo para evitar barreras innecesarias que limiten la participación de operadores.
- Criterios de adjudicación. Favorecer la objetividad y evitar valoraciones subjetivas para garantizar la transparencia del proceso.
- Duración. Establecerla considerando el contexto específico del contrato y evitando recurrir automáticamente a las duraciones máximas permitidas por la ley.
- Conocimiento de la normativa. Incluir cláusulas que refuercen el conocimiento de la normativa de competencia y del sector de las telecomunicaciones para disuadir a las empresas de cometer infracciones.
- Cumplimiento de requisitos técnicos. Asegurar la no discriminación entre los nuevos ofertantes y los actuales proveedores de los servicios en cuanto al acceso a información necesaria para presentar las ofertas.
