Despus de infructuosas bsquedas en el exterior, Nortel se decidi por alguien de dentro y anunci que el nuevo CEO sera Frank Dunn, un directivo con muchos aos de experiencia en la compaa. Los analistas interpretaron esta eleccin como una prioridad de Nortel para dar continuidad a la reduccin de costos en sus esfuerzos por recuperar la rentabilidad.
Dunn se incorpor a Nortel en 1976 y desde entonces ha ido ascendiendo en el escalafn de la firma. Ha sido vicepresidente Principal de Finanzas y Desarrollo, vicepresidente de Operaciones, Finanzas y Desarrollo y vicepresidente de Finanzas de Nortel para Norteamrica, adems de vicepresidente y auditor corporativo y vicepresidente del Grupo de Productos Inalmbricos.
Durante los ltimos aos se ha responsabilizado de las actividades destinadas a reforzar el rendimiento de las operaciones financieras internas de la empresa. Coincidiendo con su ascenso a la mxima responsabilidad de la compaa, Nortel ha experimentado una considerable transformacin en su cpula directiva. Se ha procedido a una reorganizacin con el fin de dividir la actividad de la firma en tres nuevas ramas. La primera de ellas se ha hecho cargo de las redes metropolitanas, mientras que las otras dos se ocupan de la tecnologa inalmbrica y de las redes pticas.
Adems de las dificultades econmicas y de gestin, Nortel se ha encontrado con algunos problemas aadidos que nada tienen que ver con la gestin de la compaa. As, en febrero de este ao, tuvo que renunciar a su puesto su responsable financiero por hacer uso de informacin privilegiada.
A pesar de ello, eso no significa que la firma se haya convertido en una balsa de aceite. Sin ir ms lejos, a finales de abril se celebr junta de accionistas y all los inversores se despacharon a gusto y manifestaron toda la ira y enfado que haban estado acumulando durante el ltimo ao. Al fin y al cabo, el caso de Nortel es uno de los ms llamativos porque se ha convertido en uno de los mayores y ms rpidos hundimientos financieros de la historia en la poca de la burbuja tecnolgica. Nortel ha perdido el 96 por ciento del valor de la cotizacin mxima alcanzada a mediados del ao 2000.
Dunn se enfrentaba as a su primer gran reto con los accionistas tena que convencerles del cambio que se est produciendo en la compaa y de que ese cambio va a significar una mejora en la cotizacin. Frank Dunn cape el temporal como pudo y prometi que vendrn mejores tiempos. El mximo ejecutivo de Nortel hizo esta promesa con la vista puesta en la telefona inalmbrica; tiene la esperanza de mejorar los resultados de una divisin que el primer trimestre de este ao ha conseguido una facturacin de 2.900 millones de dlares (3.011 millones de euros) gracias a que ha logrado vender equipos de telefona en todo el mundo. En total, este negocio contribuy en un 39 por ciento a la facturacin de Nortel.
Como casi todos los directivos del sector, nada ms incorporarse a su nuevo puesto, Dunn hizo frente a una reestructuracin de personal. En los dos ltimos aos la compaa ha perdido la mitad de su capital humano, pasando de los 94.000 empleados que tena en sus mejores momentos, cuando la burbuja tecnolgica estaba en lo alto, a tan solo 45.000 trabajadores. Estas reducciones de personal se han producido como consecuencia de una de las peores temporadas por las que ha atravesado Nortel, aunque no ha sido la nica, ni mucho menos. El pasado ao la crisis se agudiz hasta extremos insospechados en la mayora de las operadoras de telecomunicaciones, que son los principales clientes del grupo.
De todas formas no toda la culpa de los problemas de Nortel la tiene la crisis de las tecnolgicas. En realidad, los analistas sealan que ms all de la coyuntura negativa que atraviesa el sector, la compaa est pagando algunos errores de estrategia que la llevaron a expandirse pagando precios excesivos para hacerse con el control de otras empresas. Ahora, con graves problemas econmicos, Nortel se ha visto obligada a deshacerse de algunas de esas firmas a precios ridculos. Un ejemplo de ello es que hace pocos meses, se vio obligada a vender su filial norteamericana de servicios postventa, Clarify, por 200 millones de dlares (207 millones de euros), la mitad de lo que haba pagado por ella apenas dos aos antes.
Los planes de Frank Dunn para los prximos meses se centran en una sustancial mejora de la cuenta de resultados. Espera lograr 3.000 millones de dlares (3.111 millones de euros) de facturacin para el cuarto trimestre lo que, unido a la eliminacin que se est haciendo de determinadas lneas de produccin y a los despidos masivos que ha sufrido la compaa, permitira alcanzar el equilibrio presupuestario.
Sin embargo, no hay que olvidar que Nortel se enfrenta a una prdida de facturacin cercana al 30 por ciento durante este ao con respecto a las cifras del ejercicio anterior. Ese es uno de los grandes retos de Dunn lograr mantener la capacidad financiera para hacer frente a la situacin.
Precisamente esa cruda realidad se parece mucho a la de su ms directo competidor, Lucent Technologies. Nortel es el segundo fabricante de equipos telefnicos de EEUU y trata de sobrevivir asediada por los mismos problemas que afectan a Lucent necesita competir en un mercado a la defensiva donde se mira mucho antes de gastar dinero y que est saturado de infraestructuras.
Esta situacin es la que ha obligado a Frank Dunn a poner orden financiero en la casa. Sin embargo, el directivo asegura que la fase sangrienta ya ha pasado y ahora es el turno de la tecnologa.
El nombramiento de Frank Dunn ha decepcionado a algunos porque consideran que no podr acometer algunos cambios que hara un directivo procedente de fuera de la compaa. Algunos analistas esperaban un ejecutivo externo para que procediera a sanear, probablemente de forma an ms intensa, las cuentas del grupo.
Estos detractores de Dunn no ven con buenos ojos su promocin a la cpula de la compaa. Este directivo suscita algunas dudas porque consideran que los gerentes que ascienden a presidentes rara vez logran un crecimiento adecuado para sus compaas. Sin embargo, Dunn confa en su capacidad de liderazgo e insiste en que el desarrollo tecnolgico es la solucin a los males de Nortel y de sus clientes en 150 pases. Necesita soluciones que contribuyan a reducir sus costes y, a la vez, produzcan servicios que generen ingresos. Dunn tiene claro que debe ayudar a sus clientes para que estos ayuden a su empresa.
De todas formas, y aunque el fuerte de Dunn son las finanzas, el mximo dirigente de Nortel tiene un profundo conocimiento de los productos de la firma. Algunos analistas sealan que cuenta con un enfoque directo y prctico. No obstante, otros consideran que no cuenta con la suficiente experiencia como para hacer brillar de nuevo a Nortel. Frank Dzubeck, presidente de la Communications Network Architects, una importante consultora de Washington, ha sealado que cuando un director general de finanzas se convierte en presidente ejecutivo, las compaas nunca crecen.
Dunn no slo lucha contra opiniones como la de Dzubeck y contra el mercado, que bastante ha castigado a la empresa durante el ltimo ao y medio. Tambin se tiene que enfrentar al pesimismo de sus accionistas, que se muestran escpticos y dudan que la fortuna de la empresa vaya a cambiar pronto. Estos inversores se limitan a comparar datos de la cotizacin de sus acciones durante los ltimos ocho aos estos ltimos meses han estado en los niveles ms bajos.
De todas formas, ahora, la principal preocupacin de Dunn tiene que ser sobrevivir. Conseguir que su empresa pueda superar la recesin que afecta a las empresas de telecomunicaciones. La facturacin de Nortel podra crecen un 25 por ciento el prximo ao, segn los clculos de los analistas ms optimistas. Otros, sealan que hay que tener paciencia y esperar a que se produzca la recuperacin de los operadores de servicios de telecomunicaciones. En ese momento, estas firmas recurrirn de nuevo a compaas como Nortel. Estar en mi despacho para celebrarlo, seala Dunn.
