Con su indefectible gorro de colores y muchas veces ataviado con camisetas de Superman, Chema Alonso ha logrado seducir y convencer de su valía a la alta dirección de Telefónica. Alonso fue primero hacker, y más tarde empresario del mundo de la seguridad informática. Cuando tenía 24 años, Alonso, que es ingeniero informático de formación, fundó Informática 64. Más tarde empezó a dar charlas en foros de expertos y consejos a empresas de todo tipo.
El exhacker del gorro de colores colaboró con Telefónica durante años y de esa colaboración salió la adquisición de Informática 64 por parte de Telefónica Digital en 2013. Desde entonces, la empresa original ha quedado como laboratorio de seguridad dentro de Eleven Paths, la unidad especializada en seguridad dentro de la operadora, y que también ha sido una creación de Alonso.
Ahora, el experto en seguridad que hablaba de malware y amenazas cuando nadie lo hacía, da un paso más en el escalafón directivo de la multinacional española que dirige José María Álvarez-Pallete. Según publicaban algunos medios ayer, Alonso es desde ahora Chief Data Officer, es decir, el primer responsable de la compañía en un área tan clave en estos tiempos de transformación digital como la del big data. Alonso, que formará parte del comité ejecutivo de la compañía y que seguirá al mando de la estrategia en seguridad, sustituye a Ian Small, nombrado para el puesto a final de noviembre y que dejará la empresa a final de junio.
El nombramiento es parte de los cambios organizativos con los que Álvarez-Pallete quiere revolucionar la operadora de referencia en España. Y es que, entre otras cosas, Telefónica ha creado un área de Compliance (o cumplimiento normativo) que tendrá como responsable a Manuel Crespo. Asimismo, Juan Francisco Gallego ha sido nombrado nuevo responsable de Auditoría Interna en sustitución de Ignacio Cuesta, que deja la empresa.