El grupo Alter lleva más de 50 años a la cabeza de su sector en nuestro país. Su fundador, Juan José Alonso Grijalva, poco podía imaginar que la implantación del sistema de fichas perforadas de IBM para la confección estadística de facturas, que adquirió en 1949 y supuso en su momento el mayor avance técnico logrado en este campo, sería hoy día una codiciada pieza para cualquier museo de informática. Tampoco se hubiera figurado que el susodicho sistema sería suplantado hasta llegar a utilizar soluciones ERP y CRM, por no hablar del salto a Internet, un invento que vio la luz en 1969, cinco años después de su muerte.
Ha sido precisamente ese afán por sacarle partido a la Red, unido a su interés por estar siempre a la zaga de la última tecnología y por su política de poner todas las herramientas a su alcance al servicio del cliente lo que ha llevado a esta empresa familiar totalmente española, que tiene presencia en Portugal y la República Dominicana, a la posición en la que se encuentran actualmente.
Según señala Javier de Palma y Francés, jefe de Tecnologías de la Información de Alter Los distintos tipos de negocios del grupo Alter se basan en la información y su gestión, y nos hemos movido dentro del proceso general que ha seguido el mercado a lo largo de los años, hemos pasado de utilizar un mainframe a los sistemas distribuidos y nuevamente a un concepto más centralizado de la gestión de datos.
En el caso concreto del grupo Alter tres han sido las razones que les han llevado a decantarse por un sistema de almacenamiento SAN Primeramente, por una necesidad creciente de centralización, bajo un control de seguridad, de todos los datos del grupo descargando así al usuario de la responsabilidad de custodia. En segundo lugar, aplicar un criterio de unificación para aunar los datos que están distribuidos en los distintos sistemas de la compañía, como LIMS, Lotus Notes, Baan y otros sistemas accesorios, explica de Palma. Y, finalmente, porque empezamos a proyectarnos en Internet y a medida que crecen nuestras webs aumenta la demanda de almacenamiento.
Cuando en el año 1998, la compañía implanta un ERP de Baan y paralelamente se plantea adentrarse en Internet para mejorar la información hacia los clientes, el grupo Alter empieza a pensar en un sistema de almacenamiento flexible, escalable, tolerante a la tecnología cluster, con acceso disponible las 24 horas del día y que le permita estar totalmente seguro de la integridad de los datos.
La toma de decisión no se hizo esperar, analizamos el mercado y al final vimos que teníamos buenos referentes de Dell, puesto que la mayoría de la fuerza de venta, todos nuestros equipos corporativos, son Dell, afirma Javier de Palma.
Dentro de los factores que determinan la elección de un proveedor u otro, la firma señala que los más importantes son la tecnología y la relación coste/beneficio. Cuando el grupo Alter echó números vio que a igual producto tecnológicamente hablando, la relación coste/beneficio era más ventajosa con Dell. Otro punto a favor de este proveedor es que trabajar directamente con el fabricante flexibiliza mucho las soluciones, indica De Palma, saltar la cadena de distribución nos permite unas ofertas más personalizadas. Además todas nuestras compras con esta compañía están en renting con lo que reducimos nuestro precio. En definitiva, tenemos una solución a nuestra medida y con unas condiciones financieras adecuadas a nuestro planteamiento.
Pero hubo otros factores. Primó buscar un estándar tecnológico que les permitiera escalar soluciones de manera que hubiera una continuidad en las inversiones Luchábamos contra la sustitución de tecnología por razones de falta de capacidad. Antes, recuerda de Palma, eran que un servidor quedaba obsoleto, entonces teníamos que cambiarlo. Ahora sólo variamos el nivel de proceso, pero el almacenamiento sigue creciendo, es una de las ventajas de SAN. El otro aspecto era la reducción de consumo del ancho de banda, algo difícil de conseguir con una NAS. La utilización de SAN con Fibre Channel permite el uso de ancho de banda en red. A lo que se suma que el grupo Alter es multiplataforma, trabajamos con NT y Novell 5.0, y nos interesa la gestión lógica de dispositivos y la posibilidad de tener flexibilidad de dimensionamiento en la capacidad de almacenamiento de datos.
El proceso de compra comenzó el pasado mes de mayo y el grupo Alter recibe los equipos en julio. Las SAN se instalan en dos de los centros de la compañía ubicados en Madrid, se adquieren tres servidores 4400, dos sistemas de almacenamiento PowerVault 130T, uno de ellos con 27 DLTs y otro con 7 DLTs, unidos cada uno con un switch Fibre Channel PowerVault 51 y con un bridge PowerVault 35 a sendos PowerVault 650. Y la capacidad de almacenamiento que se contrata es de 160 Gigas, aunque dentro de sus expectativas está poder doblar esta cifra durante este año alcanzando las 360 Gigas.
Aunque la firma tiene planes a medio plazo, prefiere no pronunciarse sobre cuáles serán las próximas adquisiciones tecnológicas. De Palma advierte que es política de la compañía El criterio del grupo Alter suele ser bastante conservador, es decir, vamos por detrás de la innovación de marketing. Los fabricantes suelen tener unas campañas de comerciales más agresivas que las necesidades que tiene el cliente, cuando nosotros vemos que una tecnología está consolidada y comprobada en el mercado, entonces lo adoptamos. Siempre tecnología puntera pero en su momento de consolidación. Huímos de la política de sobredimensionamiento, algo generalmente contrario a los intereses de las compañías.
Dentro de los objetivos cercanos está incluir el estándar EDI, pero sobre todo potenciar las páginas Web de las empresas del grupo, con el comercio electrónico queremos que nuestra fuerza de venta esté más especializada, de manera que se provea un servicio 24×7. El comprador tendrá la posibilidad de elegir entre el trato personal o el acceso electrónico, siempre a su criterio, anota De Palma. Internet se convierte así en una herramienta más para satisfacer al cliente, que en el caso del grupo Alter resulta complejo dado el amplio espectro de sus demandantes desde el farmacéutico y el médico, hasta el usuario de cosméticos, de alimentación o comprador de vino. Este último es un cliente que agradece la información en Internet relativa a un mundo tan singular como el del vino. Y siempre hay preguntas puntuales que aparecen en la Web, finaliza De Palma, desde la mamá que no sabe que potito elegir para su bebé, hasta la señora que necesita saber cuál es el tratamiento de belleza para una boda y le recomendamos una ampolla de Germinal.