Cisco Systems y Dimension Data están colaborando con ITC, la empresa que proporciona servicios de outsourcing total a Caixa Catalunya, en el desarrollo de la nueva configuración de red de área local de dicha entidad basada en tecnología Ethernet conmutada. Con su implantación se conseguirá integrar en un único medio la transmisión de voz, vídeo y datos.
Según Luis Marcos, jefe de Gestión de la Infraestructura Tecnológica, entendemos que la tecnología debe jugar un papel fundamental como soporte a la estrategia de negocio. Nuestro objetivo permanente es mantener el equilibrio adecuado entre el necesario avance tecnológico, la mejora constante de los niveles de servicio y la optimización de costes. En este sentido, a finales del año pasado, creímos que había llegado el momento de abordar el cambio tecnológico desde Token Ring a Ethernet, como un elemento fundamental para seguir consolidándonos como una entidad líder en el uso de las nuevas tecnologías.
Las nuevas aplicaciones en fase de desarrollo, con mayores requerimientos gráficos y de tiempo real, la obsolescencia de la topología Token Ring, la falta de oferta de soluciones de mercado para este entorno y su mayor coste respecto de las soluciones Ethernet fueron las causas principales para arrancar un proyecto que facilitará velocidades de 100 Mbps a todos los puestos de trabajo y conexiones de Gigabit entre todos los edificios principales de la entidad.
Otros beneficios añadidos de la nueva infraestructura se centran en la posibilidad de crear redes virtuales, en las capacidades de conmutación de nivel 3 y 4 que ofrecen los equipos de Cisco, en la Calidad de Servicio (QoS) de extremo a extremo y, por supuesto, en el notable incremento de la capacidad de transporte de la nueva red.
Para la elección del proveedor, Caixa Catalunya realizó un exhaustivo análisis de soluciones en el que Cisco terminó imponiéndose gracias a tres factores, que el responsable de la entidad financiera resume en los capítulos de experiencia de mercado, claridad de los desarrollos tecnológicos a medio plazo y entusiasmo por el proyecto, sin incluir los aspectos económicos en los que ambas partes estuvieron obviamente de acuerdo las diferencias entre los suministradores finalistas no eran tanto tecnológicas o económicas, sino más bien de solidez global de la oferta y de compromiso con nuestras demandas. Es ahí donde Cisco obtuvo la ventaja decisiva.
La red, que conecta a más de mil usuarios de los edificios corporativos, comprende la instalación de equipos de la familia Catalyst 4006, para las plantas del edificio, y 6509 para el núcleo de la red. Los primeros proporcionan conexión a 100 Mbps a los usuarios y se conectan con el backbone de la red a través de enlaces de 2 Gbps, por su parte, los 6509 del núcleo distribuyen el tráfico y balancean la carga entre los diferentes servidores corporativos.
El acuerdo con Cisco incluye así mismo el suministro e instalación de más de mil conmutadores Catalyst 2924 en la red de oficinas de Caixa Catalunya, lo que permitirá extender el uso de la tecnología Ethernet conmutada a todos los usuarios de la entidad financiera.
Con este proyecto, y la remodelación de la infraestructura WAN que Caixa Catalunya llevó a cabo entre 1997 y 1999, la entidad ha propiciado una arquitectura de comunicaciones que le permite afrontar el futuro IP con garantías, aunque en este paso tenga que tomar aún decisiones tan importantes como las de encauzar su actual protocolo de comunicaciones SNA en el seno de la nueva red corporativa, un estudio que empezará a definirse durante el año próximo y que tiene dos únicas soluciones posibles ir hacia una red pura IP o encapsular SNA en el protocolo Internet; la verdad es que sea cual sea la vía, afectará al futuro de nuestras comunicaciones y también de nuestra actual plataforma bancaria soportada en la solución Altamira de Accenture, que opera bajo SNA, asegura Marcos. Accenture está trabajando sobre una nueva versión IP de Altamira, aunque se desconoce el plazo en que podría estar operativa.
La nueva arquitectura de LAN de Caixa Catalunya no es más que la guinda de una serie de proyectos que han llevado a la modernización de las infraestructuras de sistemas y de comunicaciones de la entidad catalana.
Un proceso que arrancó en 1990 con la migración desde un entorno transaccional soportado en equipos de Unisys, hacia otro basado en IBM y con la implantación de Altamira citada anteriormente, y que tuvo su continuación con el cambio, planificado a lo largo de dos años, de servicios RSAN a X.25, y desde aquí a líneas Frame Relay de 64 Kbps, que ha día de hoy siguen invariables.
Tras la consolidación de estas dos grandes áreas, no tardarían en plantearse nuevos retos, algunos coincidentes en el tiempo con los anteriores, como la creación de un data warehouse (14 nodos SP2, AIX, Oracle), el desarrollo de una plataforma Internet, inicialmente soportada sobre AIX de IBM y muy recientemente sobre una solución Sun/Oracle, o la migración del entorno operativo de oficina desde OS/2 a Windows NT. En definitiva, como explica Marcos, hemos sometido nuestras infraestructuras a una transformación que nos permitirá afrontar los cambios producidos por las nuevas tecnologías. Estamos en un momento de consolidación de grandes proyectos, pero no podemos olvidar los grandes mandatos que emanan del nuevo plan estratégico de la entidad y que pasan por mejorar la eficacia y la eficiencia de nuestro negocio es ahí donde la tecnología puede y debe aportar toda su capacidad.
