Amena, el tercer operador de móviles integrado en el hólding Auna, anunció ayer los resultados obtenidos por la compañía al cierre del ejercicio de 2000. La operadora móvil terminó el año facturando 836 millones de euros, unos 139.098 millones de pesetas y con un EBITDA negativo de 495,2 millones de euros, lo que supone 82.394 millones de pesetas.
En la entrega de resultados a la prensa Belarmino García, consejero director general de Amena, se mostró optimista e informó de que la compañía viene registrando un EBITDA positivo (beneficio antes de gastos financieros, impuestos y amortizaciones) en enero y febrero de este año y señaló que de mantenerse constante la tasa impuesta por el Gobierno en 198 millones de euros anuales, 32.944 millones de pesetas, Amena no tendrá beneficios netos hasta 2004.
García también confirmó que Amena ha alcanzado los cuatro millones de abonados y unas cuotas de mercado y crecimiento del 15.3 y 62.7 por ciento respectivamente, casi hemos cuadruplicado el número de clientes, superando en cuota de mercado de altas netas a la operadora Airtel, lo que equivale a ser la segunda operadora con mayor altas netas de clientes en España.
Con respecto a los proyectos más inmediatos, la firma se ha propuesto ganar nuevos usuarios y mantener los antiguos potenciando las estrategias de marketing y fidelización mediante la construcción de un verdadero Internet móvil y la oferta de nuevos paquetes de servicios basados en la transmisión de datos, indicó García, apostando por servicios de localización, SMS, chat y WAP bajo el paraguas de la marca n, además de una red comercial GPRS. Precisamente en esta última tecnología, GPRS, Amena tiene previsto comenzar campañas de información antes del verano para pasar a su lanzamiento comercial cuando el mercado lo acepte, probablemente después del verano; de momento ya esta desarrollando una prueba comercial usando una red GPRS de Amena con 200 clientes para ver cómo evoluciona y cómo es aceptada.
Pero más allá de la obtención de beneficios o de ampliar su cuota de mercado, el tema que más quebraderos de cabeza ocasiona hoy por hoy a la operadora móvil es la concesión de las Licencias DCS 1.800 publicadas en el BOE el 4 de marzo de 1998. En este sentido Amena presentó el pasado 2 de marzo un recurso contencioso administrativo en la Audiencia Nacional al no haber recibido respuesta del ministerio de Ciencia y Tecnología a la petición formulada por la operadora móvil el 25 de octubre de 2000 en la que le solicitaba la entrega de los 11,6 MHz de espectro asignados conforme al pliego de convocatoria del concurso DCS 1.800.
García apuntó que el espectro es para los operadores tan importante como el aire para poder respirar. De no concedernos el espectro nos estarían poniendo techo al número de clientes de Amena y nuestra aspiración es hacer un buen uso de la licencia por la que apostamos. Tenemos un contrato con la Administración, Amena está cumpliendo con su parte y queremos que la Administración respete la suya.
