A menos de un año de la apertura de zonas Wi-Fi que permiten a los cubanos conectarse a Internet público, unas 200.000 personas usan ese servicio diariamente, según reportaron funcionarios. Sin embargo, y pese a reconocer que es una de las prioridades del país, no hay fecha para instalar en la Isla conexiones domésticas, agregaron los directivos de Etecsa, la empresa monopólica estatal que administra la telefonía e Internet en la isla.
Durante una comparecencia en la televisión cubana el martes por la noche, el ingeniero Jorge Luis Legrá de Etecsa indicó que el servicio de Wi-Fi trabajó con un ancho de banda promedio de 600 Mbps (mega bits por segundo) y las horas pico registradas fueron entre las 8 y 10 de la noche. Cuba abrió 35 de estos estos espacios o puntos en julio de 2015 y a la fecha hay 85, fundamentalmente en calles y plazas en las cuales las personas pueden acceder de manera pública, pero no gratuita, pues se cobra actualmente el equivalente de 2.50 dólares la hora, una cifra que representa menos de la mitad de la tarifa del año pasado.
Al terminar 2016, en total sumarán unos 145 puntos Wi-Fi, agregó por su parte el también ingeniero de Etecsa Lázaro Vázquez. Se espera que los nuevos puntos se establezcan no sólo en lugares abiertos como hasta ahora sino en espacios cerrados como centros comerciales y culturales, indicó Vázquez.
Legrá reconoció que una de las prioridades del país sigue siendo colocar líneas domésticas, pero sostuvo que aún no se logró instalar la infraestructura necesaria, por lo que se seguirá creciendo en los puntos de acceso colectivos. Además la empresa cuenta con unas 300 salas de navegación en locales propios o centros juveniles.