Seguro y contundente. Así se expresaba el secretario de Estado de Telecomunicaciones y Sociedad de la Información, Carlos López Blanco, quien ha afirmado que la Ley General de Telecomunicaciones estará en el BOE a finales del mes de julio y confiamos en que no habrá muchos problemas para que la normativa cumpla el plazo de trasposición, que es el próximo 25 de julio, según imperan las directivas comunitarias.
Con la misma rotundidad, López Blanco descartó que las enmiendas presentadas al texto por el resto de grupos políticos, vayan a interferir en el calendario fijado para el trámite parlamentario ni en la disposición abierta del Ejecutivo a considerar las aportaciones de los grupos parlamentarios en la tramitación.
Como muestra de las palabras del secretario de Estado, ayer mismo se debatían en el Congreso de los Diputados las enmiendas presentadas por el resto de fuerzas políticas al proyecto de la Ley. Tras un caluroso debate, el PP concluía la sesión rechazando las enmiendas a la totalidad del texto que habían presentado PSOE, IU y ERC.
Desde las filas socialistas, que calificaron el proyecto de Ley de demasiado reglamentista, lo que seguirá retrasando el desarrollo de la Ley, se presentó además un texto alternativo que ampliaba el concepto de derecho universal a la telefonía móvil, además de defender un plan de financiación mixta en materia de Telecomunicaciones.
Por su parte, tanto IU como ERC defendieron su pretensión de devolver el texto al Gobierno, por considerarlo muy centralista.
El Partido Popular rechazaba finalmente todas estas enmiendas al tiempo que aseguraba, en voz del ministro de Agricultura y Pesca y Alimentación, Miguel Arias Cañete (encargado de defender el proyecto de Ley en sustitución del ministro de Ciencia y Tecnología, Josep Piqué, que se encontraba de viaje), que el texto contribuye a configurar un sector sólido y competitivo, imprescindible para lograr un desarrollo sólido y acompasado para la Sociedad de la Información.
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