Hacer realidad la nueva Ley de Firma Electrónica antes de que concluya la actual legislatura. Esa es la clara intención del Gobierno y el leit motiv que le llevará hoy viernes a aprobar el proyecto de Ley para remitirla posteriormente al Congreso de los Diputados.
El texto, preparado por el ministerio de Ciencia y Tecnología junto a los de Administraciones Públicas, Economía, Interior y Justicia, tiene como objetivo dotar a los procesos electrónicos de la autenticidad, integridad y no repudio que se precisan para ofrecer las garantías adecuadas en Internet, al tiempo que trasponer la normativa española a la directiva europea 1999/93 que establece un marco común para la e-firma en toda la Unión Europea.
Entre las principales novedades que introducirá la nueva Ley de Firma Electrónica encontramos el establecimiento de las bases jurídicas para implantar el DNI digital o la eliminación del registro de prestadores de servicios de certificación.
Una mayor autorregulación, mecanismos de supervisión y control más estrictos y multas más elevadas ante las infracciones que puedan cometerse en el área de la Firma Electrónica son otros aspectos a destacar de la nueva Ley.