Telefónica, Ericsson y el Centro Tecnológico de la Automoción de Galicia (CTAG) han presentado el Coche Conectado, un proyecto conjunto de las tres entidades para equipar a los automóviles con las últimas tecnologías con el objetivo de mejorar la conducción, la seguridad y el acceso remoto a servicios de ocio y entretenimiento desde el mismo vehículo (infotainment).
El conductor podrá recibir alertas sobre incidentes en carretera como accidentes, atascos, problemas meteorológicos, obstáculos… Así mismo, el propio vehículo podrá enviar información a un servidor central de automoción, de manera que dicha información pueda ser compartida con el resto de vehículos y conductores. Además, el coche conectado estará programado para acceder a los centros de asistencia de forma automática en caso de avería y enviar la información emitida por el propio vehículo a dicho servicio. Otra aplicación desarrollada para el coche conectado es saber el uso que se está haciendo de un vehículo: tiempo de conducción, velocidad media, frenazos bruscos, acelerones…todo ello mediante información que se extrae del vehículo y se envía a un servidor. Este tipo de información puede ser muy útil para empresas de alquiler de vehículos con el fin de conocer el uso que se está haciendo del vehículo. O por ejemplo para aseguradoras, que pueden establecer la cuota de seguro en función del tipo de conducción dentro del modelo conocido como Pay as you drive.
Según han explicado los responsables, para disponer de todos estos servicios, los automóviles dispondrán de un dispositivo integrado, además de su correspondiente puerto con una tarjeta SIM ya que las comunicaciones se realizarán vía móvil a través de tecnología 3G o 4G y utilizarán tanto la infraestructura IMS (IT Multimedia Subsystem), que aporta calidad de servicio, como tecnología IP. También está previsto que los coches que incorporen esta tecnología cuenten para la parte de infotainment con pantallas táctiles en la parte trasera de los asientos delanteros desde las que se manejará el sistema y se accederá a toda la información. Los servicios para la automoción se controlarán mediante los mandos existentes en el volante del vehículo.
El proyecto sigue todas las normativas vigentes sobre seguridad vial. Incluso hay casos como el de infotainment que está parcialmente disponible en las plazas delanteras (sólo acceso de contenidos musicales del hogar por ir el resto de servicios en contra de la normativa). Podría además incorporarse de forma sencilla cualquier otra medida o normativa al respecto que pueda aparecer.