Por Gustavo Ciuffo El año 2007 representó un punto de inflexión en el despliegue de Fiber To The Home (FTTH) en el mundo. Ya hace algunos años que desde diferentes encuentros especializados en el tema (el FTTH-Council Europe Annual Conference, por ejemplo) se vienen exhibiendo los avances en materia de fibra y las diferentes soluciones técnicas y operativas adaptadas a las necesidades locales y particularidades de cada mercado. Es cierto que esta tecnología supone una importante inversión –y que eso condiciona su despliegue– pero también es verdad que ya hay operadoras (como es el caso de ONO en España) que poseen una red íntegramente basada en fibra y con una amplia experiencia en esta hogar, la televisión digital terrestre (TDT) se ha consolidado muy rápidamente (recordemos, en este sentido, que el mes pasado se produjo el cese definitivo de las emisiones analógicas).
Los cierto es que los proveedores de servicios asociados a la fibra se muestran optimistas. Algunos de ellos explican las claves con las que trabajan para consolidar la nueva tecnología en el hogar.
Alta calidad
La mayoría de los proveedores de servicios, operadores y fabricantes coinciden en que FTTH supone la posibilidad de acceder a una amplia gama de servicios (algunos desarrollados ya, otros en fase de pruebas y muchos otros todavía en definición) que requieren un ancho de banda que las tecnologías existentes en la actualidad, desarrolladas sobre la red de cobre, no pueden ofrecer. “La popularización de las redes sociales, la web 2.0 y, en general, todo lo que implica el intercambio entre los usuarios de volúmenes de información cada vez más elevado, exige que las redes ofrezcan anchos de banda upstream mucho mayores, capaces de ofrecer una experiencia al usuario que el ADSL o el VDSL (por su carácter asimétrico) no están en condiciones de dar. Los usuarios empiezan a demandar, por ejemplo, que el hecho de querer colocar diez fotos con buena resolución en Facebook no suponga horas de espera y una enorme frustración porque el proceso se interrumpe continuamente”, explica a REDES & TELECOM Javier Polo, director de marketing de captación en la Unidad de Negocio de Home de Orange.
A propósito de lo que comenta el directivo de Orange, cabe destacar que la actual popularidad de soluciones on the cloud, los discos duros virtuales y otras herramientas similares también va a suponer una mayor demanda por parte de los usuarios de conexiones, sino simétricas, sí con mucho mayor ancho de banda del disponible hoy en día. En la misma línea, Xie Xinping, director general de Huawei España, destaca el dato de que FTTH permitirá romper el círculo por el cual no se despliegan ciertas aplicaciones por las limitaciones en el ancho de banda de los accesos domésticos y, al mismo tiempo, no se amplía este ancho de banda porque las aplicaciones que el mercado parece demandar no lo requieren. “El aumento de las aplicaciones de Internet favorecerá la llegada de la tecnología de fibra óptica a los hogares. FTTH es una infraestructura de fibra óptica de alta calidad que puede ofrecer el ancho de banda, la seguridad y la calidad de transmisión necesarios para poder utilizar varios ordenadores multimedia, consolas, dispositivos HDTV con acceso a Internet y otros sistemas de redes en un solo hogar”, explica Xinping.
Regulación y nuevos retos
En nuestro país el despliegue de FTTH es relativamente reciente. En el Principado de Asturias, por ejemplo, se desplegó la primera red de fibra hasta el hogar en la zona de los valles mineros en el año 2005. En Madrid, Telefónica realizó las primeras pruebas de campo en Pozuelo de Alarcón y en la zona de Campamento (Madrid) hace apenas dos años. Las operadoras continúan desarrollando sus proyectos, siempre atendiendo a las posibilidades que ofrece la legislación vigente. En este sentido, la actividad regulatoria será un elemento clave para el desarrollo de la competencia de estas redes con el objetivo último de que el ciudadano pueda beneficiarse de una pluralidad de ofertas. “En estos momentos estamos desarrollando un piloto comercial de FTTH en tres zonas diferentes de Madrid y, por otra parte, estamos analizando la posibilidad de convertir con administraciones públicas para explorar otras oportunidades de negocio”, explica el responsable de Orange. Otra variable a tener en cuenta es cuál será el precio que los usuarios estarán dispuestos a pagar por los servicios suministrados mediante fibra y qué servicios podrán ofrecer las operadoras para que los usuarios estén dispuestos a desembolsar más y, de esa forma, justificar la inversión. “En la industria existe el acuerdo unánime de que el acceso a banda ancha mediante fibra óptica se convertirá en el principal modo de acceso a banda ancha fija. Sin embargo, su materialización es todavía un asunto pendiente y sin fechas concretas”, explica Xie Xinping de Huawei. Es indudable que en materia de fibra –y sobre todo de FTTH– aún queda mucho por hacer. Si bien varias tecnologías de FTTH ya están disponibles, siendo el GPON la de mayor proyección futura por su economía de escala en grandes despliegues y por su capacidad, el mayor reto con el que se enfrenta la implantación de redes FTTH es la disponibilidad de una red de fibra sobre la cual desarrollar los servicios. “Hasta ahora el cobre, desplegado durante años para la voz, ha permitido dar los servicios de ADSL y VDSL, pero ahora es necesario desplegar un nuevo medio de manera generalizada y la inversión necesaria para el despliegue de fibra es importante. Por otro lado, la explotación de redes de fibra óptica reduce el número de averías en la red de acceso al ser un medio de transporte más robusto a las averías y a las interferencias”, explica a nuestra revista Ignacio Álvarez, director de soluciones de Alcatel-Lucent para España y Portugal. El directivo nos aclara también que el aumento de la velocidad de acceso obligará a los usuarios a mejorar sus redes en el hogar: el acceso de 100 Mbps implica, en algunos casos, mejorar el cableado interno de cada casa o utilizar nuevas tecnologías inalámbricas, bien con Wi-Fi de nueva generación o bien con la posibilidad de desplegar celdas de cobertura móvil para el hogar. Para Javier Polo lo primero que hay que tener en cuenta es que el despliegue de redes FTTH requiere inversiones muy elevadas y que dicho despliegue no va a poder alcanzar a todas las poblaciones de un territorio.
Como bien recuerda el directivo: “La propia CMT ya expresó hace unos meses la necesidad de que las autoridades públicas inviertan en aquellas zonas que no van a quedar cubiertas por los operadores debido a su escasa rentabilidad. Ayuntamientos, comunidades autónomas e incluso el Gobierno Central deben favorecer e impulsar la construcción de redes abiertas como ha sucedido en muchos lugares de Europa donde este esquema es muy habitual”. Para poder desplegar redes FTTH es imprescindible contar con la autorización de dichas comunidades de cara a dejar el edificio conectado y listo para iniciar las actividades comerciales. Sin ese permiso no hay posibilidad de que ningún vecino contrate el servicio de fibra. Desde nuestro punto de vista este aspecto es clave y, a pesar de su aparente nimiedad, tiene un impacto directo en los despliegues por cómo afecta a las planificaciones y el desarrollo de los tendidos de fibra. Por ello sería más que deseable que las administraciones públicas fomentaran el despliegue de nuevas redes de FTTH mediante acciones de información ciudadana e incluso planes de renovación de infraestructuras de las viviendas tales como el realizado para la TDT”, concluye Polo.
Apagón analógico y TDT
Como hemos señalado anteriormente, el apagón analógico que se terminó de concretar en el mes de marzo, permitirá que toda la recepción de la televisión terrestre sea completamente digital. Este hecho abre un mundo de posibilidades que podrán cambiar la forma de ver la televisión en el futuro. “La transmisión digital permite la emisión de servicios interactivos junto con la señal de TV. Y esto facilitará el acceso a más información sobre el propio contenido y poder acceder a nuevos servicios desde el televisor, como información bajo demanda, gaming, etcétera. Para disponer de estos servicios hay que facilitar el canal de retorno que habilite la verdadera interactividad. El canal de retorno por excelencia de estos servicios ha de ser el ADSL, por lo que no tardaremos en ver servicios de TDT integrados con conexiones de banda ancha. Además estos servicios estarán cada vez más ligado a otros web y WAP, lo que facilitará la interacción multiplataforma”, comenta el directivo de Orange. Como bien señalan los profesionales, el despliegue de la TDT va a permitir acceder a canales de TV de calidad, cuya combinación con las redes de banda ancha de fibra o ADSL brindará capacidades de televisión interactiva a todos los hogares. “Actualmente –explica Ignacio Álvarez de Alcatel-Lucent– ya se combina la recepción de canales por el aire con TDT con el acceso de banda ancha a contenidos bajo demanda o interactivos. Estamos pasando de recibir solamente unos canales de televisión a poder elegir el contenido en el momento adecuado. La combinación de canales en vivo con el acceso bajo demanda a contenidos en la web o en otros almacenamientos, así como a Internet, está desarrollando lo que creemos que será el futuro: que el usuario pueda acceder a todo tipo de contenidos y disfrute de una experiencia personal unificada”.
ONO: Fibra hasta el nodo final
Si bien Fiber To The Home es una de las tecnologías de fibra óptica más difundidas y de la que más se habla, es conveniente señalar que FTTH no es la única. En este sentido, el caso de la operadora ONO representa un buen ejemplo de una tecnología basada en fibra, altamente exitosa y alternativa a FTTH. Hace tiempo que la compañía española lleva la fibra óptica hasta el nodo final y con cable coaxial al hogar.
En el caso de las actuales tecnologías de ADSL y su evolución VDSL, la distancia desde el nodo final hasta el hogar influye en la calidad y capacidad de los servicios que reciben los usuarios. (La velocidad depende de la distancia entre el hogar y la central y la calidad de la señal se ve afectada por la antigüedad de la red). En este sentido, hay que destacar que los servicios de ONO no se ven afectados por la distancia al hogar, por lo que su capacidad llega con la calidad óptima a los hogares. Además, cabe destacar que la red de fibra óptica es propiedad de ONO y su uso es exclusivo, no comparte con otros operadores la red, por lo que la operadora dispone del máximo control posible sobre la misma.
ONO, que comenzó a desplegar su red de fibra óptica en 1998, ya ha invertido más de 8.000 millones de euros en esta infraestructura y posee la capacidad suficiente para ofrecer al cliente servicios y productos de calidad, con una conexión fiable, estable y a una buena velocidad. Además con standards como el DOCSIS 3.0, que la compañía ya está implementando en su red, los clientes pueden acceder a una señal de televisión óptima, que no se vea afectada por el uso de los otros servicios.
