El CEO de VozTelecom pisa fuerte en el mercado de la telefonía desde su nueva empresa después de haber pasado por Tiscali y haber aprendido la lección de que en España las ofertas empresariales tienen cabida, pero en el mercado residencial no se gana si no se domina el acceso.
Ustedes hacen gala de ofrecer servicios sin permanencia contractual mínima, sin letra pequeña y sin sorpresas, ¿no debería darse por hecho esto último en cualquier compañía de telefonía?
Pues sí, debería darse por hecho, pero la mayor parte de las ofertas siempre llegan asteriscos y un montón de texto debajo, por contra nosotros hemos querido ser transparentes, con una oferta sencilla y sin ataduras, el cliente puede irse en cualquier momento si ha demandado servicios que no incluyen hardware; en el caso de que incluya equipo, se le reintegra el cien por cien del dinero cuando devuelve el equipamiento. Para VozTelecom esta propuesta es uno de los principales ganchos para atraer clientes.
Llevan creciendo una media de un 60 por ciento anual desde 2008 y manifiestan abiertamente su intención de convertirse en tres años en el operador alternativo líder a los tradicionales en el segmento profesional. ¿No les preocupa morir de éxito?
Nos preocupa morir de éxito y muchísimo, de ahí que nos volcamos en gestionar bien los servicios al cliente para que eso no ocurra. Aún así, sigo pensando que vamos a seguir creciendo, el mercado se ha concentrado en muy pocos operadores, en cuatro grandes, pero hay un espacio para los pequeños, aquellos que llegamos con una oferta personalizada, muy especializada y mimada. Para no morir de éxito hacemos los deberes para tener y mantener clientes, nuestro objetivo es contar con clientes satisfechos.
Antes de fundar VozTelecom, usted había trabajado en Tiscali, una empresa con poco éxito en España, ¿qué aprendió de su paso por ella que no haya repetido en la compañía actual?
Aprendí dos lecciones: repetir el modelo donde Tiscali tuvo éxito y alejarme de su punto flaco. Su error fue abordar el mercado residencial, donde es muy difícil ganar clientes a base de crear servicios porque sólo permanece el operador que domina el acceso. En cambio, en Tiscali llegamos a facturar siete millones de euros en servicios a empresas en cuatro años, fue la división más rentable. Dejé el negocio por divergencia de visión: proponía un modelo dirigido cien por cien al segmento empresarial y desde Italia apostaban por uno cien por cien residencial y fracasaron. El nacimiento de VozTelecom, en parte, viene de aquella etapa.
Recientemente han estrechado la mano con Highgrowth Innovación a cambio de una inversión de capital. ¿Ya no podemos recurrir a los bancos?
Las empresas tecnológicas tienen como único instrumento de financiación real a las empresas de capital riesgo. Esto es algo habitual en Estados Unidos y lo raro es que no se haga en España con más frecuencia, dado que es un instrumento excelente para crecer. Aún así, no sólo hemos contado con Highgrowth Innovación, también hemos solicitado créditos a otras entidades.
VozTelecom da servicios a empresas. ¿Qué utiliza en casa para que sus hijos se conecten a Internet: a un competidor cercano tipo Skype o con una oferta de Movistar?
Bueno, nosotros solo ofrecemos servicios a empresas, pero tenemos algunos clientes particulares. Se trata de aquellas empresas que nos piden para sus casas acceso desde VozTelecom. Ese es mi caso, el de los empleados y algún cliente, pero lo vemos como un servicio puntual de valor añadido para los clientes, no es una línea de negocio, ni lo va a ser.
Me cuentan que hace años tocaba la guitarra clásica, después el piano y ahora el saxo, porque es el instrumento que más “le apasiona” en esta etapa de su vida. Si considera que hay un instrumento para cada período vital, seguro que también puede haberlo para cada modelo de telefonía… ¿cuál es el más adecuado para las llamadas por IP?
En el campo de la música hay una evolución en todas las personas, la guitarra entra en la juventud, el piano es un instrumento para conocer la música para descubrirla de forma completa y el saxo es el instrumento por excelencia de la improvisación y el jazz, del tocar sin partitura, pero esto no es trasferible al mundo de la empresa y la telefonía donde todo es previsible y pautado.
En telefonía, la conclusión que puedo extraer es que hoy día el 95 por ciento de nuestros usuarios utilizan el teléfono IP de sobremesa, aunque muchas funcionalidades ya no se gestionan desde el teléfono sino desde una página de Internet. Aún así, en el último año percibimos una tendencia a usar la telefonía IP desde los móviles, de ahí el servicio de la extensión telefónica de la empresa desde el teléfono iPhone, luego iremos con Android en los próximos meses.