La Asociación Europea de Operadores de Redes de Telecomunicaciones (ETNO) y la GSMA, junto con la Asociación Europea de Compañías Aéreas de Red (ENAA), toman nota del informe de los servicios de la DG COMP sobre la protección de la competencia en un mundo cambiante.
Las entidades alegan que una competencia sana y sostenible impulsa la innovación y la inversión, lo que a su vez repercute en la competitividad y el bienestar de los ciudadanos. “Nuestros miembros, día tras día, compiten ferozmente para innovar en sus respectivos sectores y ofrecer opciones y calidad a los ciudadanos y empresas europeos. Pero hay un límite a la capacidad de nuestros miembros para invertir cuando muchos de ellos están operando por debajo de los costes de capital”, denuncian. En este sentido, indican que la experiencia de sus organizaciones miembros indica que la UE tiene un margen significativo para mejorar sus políticas de competencia con el fin de impulsar la competitividad de la región y un verdadero mercado único, de modo que pueda hacer frente plenamente a los retos económicos y sociales actuales, también a escala mundial.
Telecomunicaciones
Europa tiene actualmente la inversión per cápita en telecomunicaciones más baja de todas las principales regiones, incluidos mercados prósperos como Corea del Sur, Japón y Estados Unidos. Esto ha llevado a Europa a situarse a la cola a nivel mundial tanto en el despliegue de la 5G como en la innovación en la conectividad, lo que se ha traducido en una menor calidad de los servicios y en la adopción digital. “Esto perjudica la competencia y el bienestar de los consumidores que no pueden acceder a las últimas tecnologías y servicios innovadores a medio y largo plazo”, denuncian.
Europa tiene actualmente la inversión per cápita en telecomunicaciones más baja de todas las principales regiones
Desde la ETNO y GSMA sostiene que observan que, sin embargo, en el informe se constataba que los efectos positivos sobre la inversión en redes en mercados más concentrados no podían discernirse de manera fiable en la industria de las telecomunicaciones móviles. Además, el informe hace una comparación entre la UE y los EE. UU., mostrando que el nivel de inversión en los EE. UU. ha sido consistentemente mayor que en la UE, pero con un ingreso promedio por usuario (ARPU) más alto que en la UE.
“No estamos de acuerdo con los hallazgos del estudio, que sugieren que una mayor concentración se asocia con una menor inversión, o al menos no con una mayor inversión. Esto es contrario a los estudios recientes de la GSMA, que han demostrado que el vínculo entre una menor concentración y una menor inversión por operador es estadísticamente significativo y sólido a través de varios métodos y controles”, recalcan. Y argumentan que la consolidación en el mercado y los mercados de tres actores generan más inversión, lo que significa que los consumidores pagarán por productos y servicios de mejor calidad.
Asimismo, tampoco están de acuerdo con las constataciones de que la consolidación de las telecomunicaciones móviles tiende a dar lugar a precios más altos para los usuarios. “Para llegar a sus conclusiones sobre la fijación de precios, el informe se basa únicamente en el ARPU para medir los precios. Esto se debe a que el ARPU ignora la cantidad de tráfico de datos consumido, que es un elemento crítico para evaluar la calidad de los productos y servicios de consumo”.
Aluden asimismo al informe de Enrico Letta en el que se menciona que las empresas europeas en general necesitan alcanzar escala para mejorar su competitividad: “Hoy en día, las empresas europeas sufren un déficit de tamaño impresionante en comparación con sus competidores globales, principalmente de Estados Unidos y China”.
“Estamos de acuerdo con el informe de Letta, y creemos que una visión a largo plazo centrada en estrategias de inversión que impulsen la competitividad y la prosperidad de la UE debería integrarse urgentemente en el pensamiento y la toma de decisiones de la DG COMP. Esto redundaría en beneficio de los ciudadanos europeos, definidos como algo más que meros consumidores de productos y servicios concentrados únicamente en el precio”.
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Las peticiones de las líneas aéreas
Las compañías aéreas de la red de la UE, con sus centros de operaciones en Europa, sirven a los intereses estratégicos de la UE garantizando la conectividad intraeuropea y mundial tanto para las personas como para las mercancías. “Nuestro modelo hub-and-spoke permite una gran red de conexiones, lo que garantiza que incluso las ciudades y regiones europeas más remotas puedan estar completamente conectadas a una multitud de destinos en toda Europa y el mundo”, especifican.
Sobre esta declaración, alegan que los miembros de la ENAA compiten ferozmente con los transportistas de fuera de la UE, que a menudo son de propiedad estatal y están subvencionados, o se benefician de ventajas competitivas debido a un marco normativo más favorable. Si bien el panorama legislativo de la UE debería salvaguardar y promover la competitividad de las industrias europeas, actualmente ocurre lo contrario. Como consecuencia, en los últimos 10 años, las compañías aéreas europeas han perdido continuamente cuotas de mercado, concretamente en las rutas UE-Asia y UE-África, frente a las compañías aéreas de la región del Golfo y Turquía.
Llamamiento en favor de la competitividad
Por este motivo, los sectores telco y de aviación unen sus fuerzas para hacer un llamamiento firme, unido y urgente en favor de la competitividad, la resiliencia, las inversiones, la innovación, la seguridad y la conectividad, y de que el crecimiento sostenible se tenga en cuenta por fin a la hora de desarrollar y aplicar la política de competencia de la UE. “Unos sectores económicos europeos fuertes serán capaces de proporcionar empleo sostenido a nuestros ciudadanos, así como acceso a las últimas tecnologías, productos y servicios de alta calidad, más opciones e innovación”, declaran.
Las asociaciones firmantes apoyan la aplicación de reformas reglamentarias favorables a la competencia
Como se destaca en el estudio de la DG COMP, uno de los principales impulsores de la evolución de la competencia dentro de la UE es la aplicación de reformas reglamentarias favorables a la competencia. “Apoyamos firmemente esta conclusión. Estas reformas deben llevarse a cabo, como siempre, en un diálogo abierto con las industrias pertinentes y teniendo en cuenta los datos sectoriales disponibles de todas las partes interesadas, para desarrollar las soluciones reglamentarias más eficaces”.
Con un enfoque orientado hacia el futuro, “estaremos encantados de contribuir a la investigación sobre la situación actual y el futuro de los sectores. Estaremos encantados de trabajar de forma constructiva con las autoridades de competencia y los responsables políticos de la Comisión Europea para encontrar un enfoque que permita contar con agentes europeos más sostenibles y financieramente sólidos que puedan invertir continuamente en mejores servicios, más opciones e innovación”, observan. Y concluyen diciendo que la promoción de una cooperación público-privada verdaderamente eficaz es clave en un momento en el que se elabora la futura orientación política del nuevo mandato, especialmente en este momento difícil para la competitividad y el progreso económico de la UE.
