Casi nueve de cada diez españoles (el 88%) consideran que la banda ancha forma parte de la infraestructura crítica del país. Así se desprende del estudio Broadband Survey de Cisco, basado en consultas a más de 21.000 encuestados de 12 países de EMEA (2.020 en España) sobre cómo utilizan la banda ancha y qué esperan en términos de conectividad, sostenibilidad y servicios.
Con un 66% de la población mundial conectada a Internet en 2022 (un 22% más que en 2019), la evolución hacia un mundo digital resulta esencial e imparable. Según los datos de Cisco, en España hay 36,5 millones de internautas (78% de la población) y 350 millones de dispositivos conectados.
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Sostenibilidad
El estudio desvela que casi la mitad de los internautas españoles (el 47%) están preocupados por la huella de carbono de su banda ancha (65% en EMEA) y más de una quinta parte (el 21%) de los usuarios que tienen previsto cambiar de servicio en los próximos 12 meses tendrán en cuenta la banda ancha sostenible como factor clave en su elección (21% en EMEA).
Así, una gran mayoría de consultados en España (el 71%) estarían dispuestos a pagar más por una banda ancha ecológica (77% en EMEA) y uno de cada ocho (el 12%) aceptarían una prima superior al 20% (27% en EMEA). Todo ello a pesar de que la inflación ha obligado a algunos a reducir gastos: el 19% de los españoles han cambiado a un paquete más económico y el 16% han cancelado servicios de streaming (21% y 16% en EMEA, respectivamente).
No obstante, aunque los proveedores de servicios han avanzado mucho en la descarbonización de sus operaciones, un 22% de los consultados en España no han oído hablar nunca de la huella de carbono de Internet y otro 37% no sabrían explicarla correctamente (25% y 34% en EMEA, respectivamente).
La seguridad, prioritaria
La mezcla entre vida digital y real conlleva nuevos riesgos en los hogares. A pesar de que muchos españoles utilizan su banda ancha para el teletrabajo y la banca digital, las contraseñas siguen siendo la forma más popular de proteger la banda ancha doméstica (50%), y sólo el 29% han activado el cortafuegos de su router (53% y 25% en EMEA, respectivamente).
Sin embargo, los consultados son conscientes de estos riesgos. La seguridad constituye la máxima prioridad entre los españoles que tienen previsto actualizar su servicio el próximo año (40%), seguida de cerca por mayor velocidad (35%) y la fiabilidad de la conexión (33%). En EMEA, se prioriza más la velocidad (40%) frente a la seguridad (38%).
Un futuro digital
Los españoles utilizan Internet para realizar una gran parte de sus tareas cotidianas, y el 88% consideran la banda ancha una infraestructura nacional crítica, como el agua y la electricidad (79% en EMEA). También están evolucionando hacia una vida digital ‘más inteligente’ facilitada por el Internet of Things. Una quinta parte (el 20%) han conectado un dispositivo para controlar la iluminación de su casa (22% en EMEA). Y casi uno de cada cuatro (el 23%) lo hacen para reforzar la seguridad del hogar (17% en EMEA).
La mayoría de internautas españoles (el 44%), conectan su hogar a Internet mediante banda ancha de fibra óptica (31% en EMEA). El 14% tienen un servicio estándar de banda ancha ADSL (14% en EMEA), mientras el 8% utilizan el teléfono móvil y otro 22% conectan su portátil a través de datos móviles (14% y 26% en EMEA, respectivamente).
Con respecto a la calidad del servicio, la mayoría califican como ‘buena’ o ‘excelente’ la fiabilidad de su conexión a Internet en el hogar (74% en España y 72% en EMEA). Sin embargo, uno de cada cinco españoles (el 20%) afirman que la fiabilidad de su servicio no estuvo a la altura de sus expectativas en algún momento del pasado principalmente por la lentitud al cargarse los sitios web o transmitirse los servicios (33% en EMEA).