Dos años después de que Siemens decidiera reorganizar sus actividades de servicios y soluciones en España en torno a la división SBS (Siemens Business Services), cuyas actividades con anterioridad a 1998 estaban repartidas entre Siemens Nixdorf, Siemens Redes Corporativas y otras divisiones, asume ahora el reto de cuadruplicar su facturación en el plazo de dos o tres años.
Este negocio les ha llevado a facturar durante su último ejercicio fiscal cerca de 8.300 millones de pesetas (60,1 millones de euros) con una plantilla directa de 320 empleados y acceso, a través de partners y socios, a más de 800 consultores. Esta es, a juicio de Dueñas, una de las características que les distinguen de sus competidores al estimar que en ámbito de los servicios y soluciones las personas son las que marcan la diferencia y nosotros contamos con una plantilla de colaboradores excepcionales.
De cara al futuro, SBS se plantea multiplicar por cuatro su facturación en el plazo de los dos o tres próximos años. Los pilares de esa expansión, según Dueñas, se basan en esos colaboradores y en el hecho de operar en un mercado que está creciendo muy rápido y porque esperamos una explosión del e-business en un par de años. No es ilógico que el crecimiento sea tan rápido.
La estrategia que utiliza SBS se fundamenta en dos ejes principales. Por un lado, vertical, orientado hacia sectores como los de Telecomunicación, Banca, Utilities, Entidades financieras y Administración; y por otro, en la cercanía geográfica a los clientes, con una presencia en todas las capitales de provincia.
A escala corporativa, SBS facturó 4.600 millones de euros (765.400 millones de pesetas) en 1999, cifra que le sitúa en el segundo puesto del ranking europeo y el octavo a escala mundial. El objetivo que ahora se marca la compañía es consolidarse entre las cinco firmas más importantes en el mundo de los servicios para el año 2003.
