La baja tasa de penetración de Internet a través de los ordenadores y las largas jornadas de trabajo que se traducen en mucho tiempo fuera de los hogares son dos de las razones que, según Luis Escurra, director general de desarrollo de servicios de Telefónica, empujarán el triunfo de i-mode en España.
Y es que el optimismo que ha seguido al lanzamiento de este servicio en España, efectuado el pasado jueves, ya se ha hecho notar. En este sentido, desde Telefónica Móviles se ha expresado públicamente que en menos de dos años la compañía estará en disposición de recuperar los 30 millones de euros invertidos en esta tecnología japonesa, que sólo en este país cuenta con 38 millones de usuarios. Sin embargo, antes tendrá que limar asperezas con Nokia, el fabricante que más terminales vende en nuestro país, que se ha negado a sacar al mercado dispositivos con esta tecnología.
En lo que respecta a los servicios que se prestarán y aunque el modelo de i-mode que se ha lanzado en España es bastante similar al comercializado en Japón por NTT DoCoMo, según Escurra, existen cuatro diferencias básicas que lo diferencian. La primera de ellas es la de que Telefónica Móviles no utilizará la marca i-mode, sino que ofrecerá los servicios a través de su plataforma e-mocion. La segunda, beneficia a los clientes de prepago, que tendrán la posibilidad de utilizar este servicio además de poder enviar mensajes multimedia y facturar en función de los datos descargados.
