Los consumidores, las empresas y la Administración de los países nórdicos están a la cabeza de la lista como los que más valor obtienen de la utilización de la web, desplazando a Estados Unidos, a pesar de que fue uno de los pioneros junto con Australia. Según indican los resultados de la última edición de este informe, los países que están avanzando más en este campo son aquellos que han puesto en marcha programas en los que están implicados diferentes organismos públicos y empresas privadas, así como aquellos que analizan los pasos que están dando otros países en este área.
Los datos provienen del estudio The e-readiness rankings, elaborado por The Economist Intelligence Unit en colaboración con IBM. Ambas entidades desarrollan este trabajo de forma anual desde el año 2000 para analizar la capacidad que tienen 60 países para aprovechar las oportunidades que presenta Internet, las cuales siguen siendo desiguales en las diferentes áreas geográficas del mundo, a pesar de que se va generalizando el uso de las tecnologías más asequibles y fiables como la telefonía móvil, el ancho de banda o los protocolos IP.
Nuestro país está en el lugar 18 respecto al nivel de adopción de las prácticas e-business por consumidores y empresas. Es decir, el porcentaje de la distribución (venta al público) que se realiza a través de la Web, el grado en el que Internet se está utilizando en la automatización de los procesos tradicionales de negocio o el porcentaje del PIB que invierten los gobiernos en tecnologías de la información. Así mismo, y teniendo en cuenta que el desarrollo del e-business depende en gran medida del entorno legal y político, España ocupa la posición número 11 del ranking en el aspecto regulatorio.
</strong>Respecto al nivel de conectividad e infraestructura tecnológica, nos encontramos en el puesto 24, ya que la penetración de Internet y los PCs está por debajo del 35 por ciento mientras los países más avanzados alcanzan el 70 por ciento. La misma posición ocupa la categoría de entorno social y cultural donde se evalúa la aceptación y experiencia del uso del Internet en nuestro país.
En lo referente al grado de madurez del tejido empresarial y potencial para atraer inversiones nuestro país está en la vigésima posición, por debajo de la media de los países de Europa Occidental. Esta categoría analiza 70 indicadores del mundo empresarial entre los que figuran por ejemplo, la fortaleza de la economía, la estabilidad política, el marco regulador, el sistema tributario, la política de competencias, el mercado de trabajo, la calidad de la infraestructura y el grado de apertura al comercio y la inversión.<br />
